Salud

«Cuantas más veces te pones rojo más posible es el cáncer de piel»

Joan Ramon Garcés/ Especialista en dermatología médico-quirúrgica
Joan Ramon Garcés/ Especialista en dermatología médico-quirúrgicalarazon

¿Somos conscientes de la importancia de la piel y su cuidado?

– No somo suficientemente conscientes porque sino, no nos quemaríamos cada verano ni tendríamos los problemas cutáneos derivados de la radiación solar.

– Hoy en día existen infinidad de tratamientos y cremas milagrosas que dicen proporcionar una mejor salud y estado a nuestra piel. ¿Cuánto hay de cierto en esto?

– Muy poco, casi nada por no decir nada. A las cremas se les atribuye unas virtudes que no son reales. Son eufemismos del mundo del márketing y la publicidad que también se usan en cosmética. En general, el mundo de la cosmética raya en lo falso.

– ¿Cuál es el mejor cuidado para la piel?

– La piel, como cualquier epitelio, hay que cuidarlo, protegerlo y alimentarlo. Se nutre con una buena alimentacion - y la mediterránea es la mejor que tenemos- e hidratación; se protege del sol a base de protección física, como la ropa, o química, como los filtros. Y dependiendo de la piel de cada persona, tenemos que utilizar los productos que el mercado nos da para cuidarla externamente.

– ¿El sol es el principal agente agresivo de la piel? ¿Desaconseja tomar el sol? ¿Cuál es su verdadera incidencia y qué consecuencias puede tener sobre la piel?

– Lo más importante es saber qué piel tenemos. Si tienes una piel blanca, sin protección, nórdica, sólo con que el sol te dé, tienes más que suficiente, no debes tomar el sol. Sin embargo, si tienes una piel oscura, incluso negra, deberías tomar el sol porque esa piel sin sol no tiene vitamina D. Así, por ejemplo, una persona de piel oscura que viva en Suecia probablemente deberá tomar un suplemento de vitamina D. Según tu piel y donde vives tienes o no que tomar el sol e incluso existe la posibilidad de que tengas que tomar suplemento vitamínico. En una piel mediterránea deberíamos ir con cuidado de no pasarnos con el sol porque seguro que si nos pasamos nos arrugaremos, nos mancharemos y nos envejeceremos más. Además, es probable que podamos incidir en la frecuencia de un cáncer de piel posteriormente.

– ¿Pero cómo se mide el no pasarse con el sol?

– No te puedes poner rojo. Si te pones rojo, te has pasado, es que ya tienes una quemadura solar aunque sea mínima. Y si te pones rojo varias veces, te pasas varias veces y cuantas más veces te pasas, más números tendrás para tener un cáncer de piel en el futuro.

– Pero el sol también tiene beneficios

– Es imprescindible para la vida, es básico pero aparte, directamente sobre la raza humana, aporta vitamina D e influye en el calcio y la mineralización de los huesos. Además hay muchas más influencias positivas como puede ser sobre la presión arterial, el colesterol y muchas más cosas que están en investigación.

– En cualquier caso, la gente suele ser reacia a ponerse protección porque existe la creencia que con crema uno se broncea menos.

– El moreno no está relacionado con la crema solar. La gente percibe que cuando se pone roja, este rojo se va a convertir en moreno después, pero no es necesario pasar por el rojo para ponerse moreno. La célula necesita un par de días para fabricar melanina y si tu estimulas la célula para crear melanina, no hace falta que te quemes para que la melanina aparezca. Te pondrías moreno igual con un filtro pero progresivamente y sin pasar por la fase de quemadura. El filtro te protege de la quemadura.

– Sabiendo todos estos riesgos que supone tomar el sol, ¿por qué la gente sigue haciéndolo de forma intensiva y frecuentemente imprudente?

– La recompensa de estar bronceado aún nos sube la autoestima porque se asocia a tener buena salud y estar más atractivo.

– Ha aumentado mucho el cáncer de piel. ¿A qué se debe?

– El cáncer de piel es el más frecuente que existe, sobre todo en la raza humana caucásica. Particularmente hay un cáncer de piel que, por suerte, es el más benigno, que se llama carcinoma basocelular, el cual es el más frecuente y va aumentando cada año progresivamente. Ese aumento se cree que es fruto de la moda del bronceado en los años 50 y 60, cuando empezó a asociarse el moreno con salud, riqueza, bienestar...

- ¿Existen muchos tipos de cáncer de piel?

– Muchos, tantos como tipos de células tenemos en la piel. El más frecuente es el carcinoma basocelular y el más maligno sería el temido melanoma.

– ¿Cómo se trata?

– Pues depende del cáncer que sea, pero básicamente la cirugía es lo mejor, lo más resolutivo, rápido y económico, pero hoy en día han surgido tratamientos nuevos que, para cánceres superficiales son muy efectivos. Estamos avanzando mucho. Incluso hay un tratamiento interno, biológico, que puede eliminar o reducir carcinomas inoperables.

– ¿Cuáles son los síntomas visuales de un cáncer de piel?

– Es el cáncer más fácil de diagnosticar porque la piel nos la vemos. Si en una buena autoexploración uno ve una lesión en la piel que se modifica, que crece, que sangra sin causa aparente hay que consultarlo porque podría tratarse de un cáncer de piel, aunque la mayoría de las lesiones no lo serán

– ¿Cuál es el índice de curación?

– Elevadísimo si se extirpa al inicio, como todos los cánceres, pero como el de piel se puede diagnosticar en fases muy incipientes, el índice de curación es casi total. Si se detecta al inicio es casi 100 por 100 curable. Luego se complica.

– Explíqueme la frase: «la piel tiene memoria».

– La radiación solar tiene un efecto inmediato sobre la piel, que es la quemadura, pero tiene otro retardado, de memoria, que no es inmediato, sino que pueden pasar 10, 20 o 30 años. Al cabo de los años vamos a ver las consecuencias no inmediatas de esta radiación.