San Fermín

70 años del primer triunfo de Ordóñez en San Fermín

El 8 de julio de 1953 logró la primera de las 8 salidas a hombros del coso pamplonica, en el que fue un auténtico ídolo

Cartel de la feria de San Fermín de 1953
70 años del primer triunfo de Ordóñez en San FermínLa Razón

Fue el día de San Fermín de 1952 cuando Antonio Ordóñez toreó por primera vez como matador en Pamplona. Había tomado la alternativa dos años antes, el 28 de junio de 1951, en un festejo a beneficio del Montepío de la Policía en Las Ventas y con ganado de Galache. Vestido de celeste y oro, su padrino fue Julio Aparicio, que otorgaba por primera vez un doctorado, y cortó tres orejas, y testigo Litri, que cortó una. “Bravío” fue el primer toro que mató.

Aquella tarde se lidiaron toros de Martínez Elizondo y alternó con Luis Miguel Dominguín, José María Martorell e Isidro Marín, que fue el gran triunfador de la función al cortar cuatro orejas. Una paseó de su segundo Ordóñez. Volvió a torear en aquel serial el día 10, para lidiar toros de Villamarta junto a Manolo González y Litri, que no estuvieron afortunados, dando el de Ronda dos vueltas al ruedo. Pero su primer gran triunfo en el coso de La Misericordia hubo que esperar un año. Fue el 8 de julio de 1953.

Aquel día en Pamplona, en la segunda de las cinco corridas de que se compuso el abono, actuó junto a Juan Posada, que sustituyó al anunciado Emilio Ortuño “Jumillano”, y Jorge Aguilar “El Ranchero” lidiando toros de Atanasio Fernández. Cortó tres orejas. Dos días más tarde repitió en la Monumental pamplonica para matar toros de Juan Cobaleda acompañado en esta ocasión por Julio Aparicio y Pedro Martínez “Pedrés”, cortando las dos orejas de cada uno de sus toros.

A partir de entonces fue base de la Feria del Toro, anunciándose hasta en cuatro ocasiones por feria alguno de los años posteriores a su primer gran triunfo.

El 7 de julio de 1961 tuvo lugar el debut de su ganadería en la feria de San Fermín. Ese día el torero rondeño corrió el encierro y cuenta la leyenda que, por la tarde, vestido de luces, se enfrentó a sus toros y logró un gran éxito. Pero es sólo leyenda. Quienes se enfrentaron a sus toros aquel día fueron Mondeño, Curro Girón y El Viti, saliendo a hombros estos dos últimos.

Ordóñez estuvo 33 tardes en Pamplona desde 1949 hasta 1971. Los espectadores que tuvieron ocasión de verle torear coinciden en que era uno de los mayores motivadores de la historia de la plaza y que marcó la época dorada de Pamplona, donde dejó una huella artística imborrable. Además, en el aspecto contable, hay que dejar constancia que en este coso logró salir por su puerta grande en ocho ocasiones, al margen de las diez veces que paseó un único trofeo.