contra el Huesca

Cada vez resulta más complicado recitar de memoria una alineación del Atlético de Madrid y si no que se lo pregunten al speaker del Wanda Metropolitano. Al margen de que Simeone no es de ese tipo de técnicos acostumbrados a usar un once fijo, esta temporada las lesiones tampoco le están ayudando a ello

El Atlético viaja a Huesca para enfretarse al conjunto aragonés (18:30 beIN LaLiga) con sólo trece futbolistas del primer equipo, entre ellos los dos porteros. Un dato realmente preocupante para uno de los equipos que aspiran a destronar al Barcelona del trono liguero.

A las bajas de Filipe Luis, Saúl, Vitolo, Savic y Diego Costa, se han unido las de Kalinic y Gelson Martins. Una faringoamigdalitis del delantero bálcanico y unas molestias musculares en un muslo del caboverdiano han provocado que Simeone haya tenido que recurrir a la cantera para completar la lista de 19 jugadores.

Montero, Toni Moya, Roro, Borja Garcés, Joaquín y Mollejo son los seis canteros que tratarán de ayudar a un Simeone que, cuando mire hacia el banquillo en busca de soluciones, sólo se encontrará con un rostro del primer equipo. Una situación nueva para el técnico, pero pese a ello, confía en los canteranos: "Saben lo que es competir con el primer equipo, si están aquí es porque pueden jugar, estoy convencido de que lo harán muy bien", afirmó el argentino.

Sobre el partido, Simeone sabe que el choque frente al conjunto de Francisco será de todo menos fácil. "El Huesca ha crecido muchísimo a nivel competitivo, le ganó al Betis y compitió muy bien el último partido"anadió en rueda de prensa un Simeone que reconoció que este año en LaLiga "hay mucha competencia".

Ante la crisis que acompaña al equipo tras la eliminación copera ante el Girona, el entrenador rojiblanco es cauto. "Ustedes me preguntaron qué les pedía a los Reyes Magos, yo les pedí tranquilidad y energía, y de eso tengo mucho. Tranquilos que esto es largo, hay que esperar sentado, tranquilito", expresó.

Paciencia es lo que necesita Simeone ante la plaga de lesionados que tienen a su equipo bajo mínimos.