La Justicia estudia el envío de niños con cuentagotas al Dionisia Plaza

La sala de lo Contencioso-administrativo admite a trámite el recurso interpuesto por el centro por incumplimiento del concierto firmado en 2014

Las acciones emprendidas por el centro de rehabilitación médico psicopedagógico Dionisia Plaza de Madrid ante la situación generada por la falta del cumplimiento del concierto con la Consejería de Sanidad de esta Comunidad parece que comienzan a dar frutos. La primera de ellas, según ha podido saber este periódico, la admisión a trámite del recurso interpuesto por el centro contra la Consejería de Sanidad por el incumplimiento de dicho concierto –alcanzado mediante concurso público en 2014– por el Tribunal Superior de Justicia de Madrid.

El constante y paulatino descenso en el número de niños derivados al Dionisia Plaza desde el Servicio Madrileño de Salud parecía abocar al cierre a este centro de referencia «para la rehabilitación y hospitalización de niños y adolescentes con enfermedades en el sistema nervioso, anomalías congénitas y trastornos mentales en el régimen de hospitalización de día y para la realización de procedimientos terapéuticos de rehabilitación», según reconocía el propio consejero de Sanidad, Jesús Sánchez Martos, en una comparecencia en la Asamblea de Madrid en 2016.

Así, de las 230 plazas que recogía el acuerdo, en los últimos meses tan solo 170 están cubiertas. O lo que es lo mismo: 60 plazas que podrían ser ocupadas por niños con enfermedades neurológicas y/o psiquiátricas y beneficiarse del abordaje integral ofrecido por el centro permanecen vacías. Algo extraño, pues se trata de un recurso único en la Comunidad gracias a la atención integral que ofrece a las necesidades de estos jóvenes en un solo centro: tratamientos de rehabilitación específicos acordes a su situación y escolarización. Y es que son niños que, por sus circunstancias, no pueden seguir el ritmo en un centro de educación ordinaria pero que tampoco encajan en la educación especial.

Encuentro en marzo

Por otra parte, la Comunidad de Madrid habría aceptado por fin sentarse a hablar con el gerente del centro, Enrique Plaza, sobre la situación que atraviesa el Dionisia Plaza. A dicha reunión, que tendrá lugar el próximo 6 de marzo, está previsto que acudan los viceconsejeros de Sanidad y de Educación, Manuel Molina y Cristina Álvarez, respectivamente.

Previamente (en concreto el pasado 3 de febrero), representantes de ambas Consejerías ya mantuvieron un encuentro con los padres del centro del que, sin embargo, no habría salido ningún tipo de solución a corto plazo.

Queda pendiente también la realización de una pregunta en la Asamblea de Madrid sobre la situación del centro. Como ya informó este suplemento la semana pasada, el Grupo Parlamentario Socialista ha solicitado la comparecencia del viceconsejero de Sanidad ante la Comisión de Sanidad con el objeto de informar sobre la «intención de mantenerlo como centro concertado con el Servicio Madrileño de Salud y, por lo tanto, la misma actividad».

El cierre del Dionisia Plaza supondría privar a la sociedad madrileña de un centro único en la Comunidad y que se ha demostrado efectivo. A él acuden niños que no tienen ubicación definida ni tratamiento adecuado o de suficiente calidad dentro de los recursos ordinarios de los que dispone el sistema público. Además, el fin del concierto dejaría a muchas familias sin posibilidad de acceder a un tratamiento de similares características puesto que aquellos que existen son de carácter privado y resultan muy caros.