Salud

Más de un millón de personas en España sufren trastorno bipolar

Sólo un tercio los pacientes con este trastorno del ánimo tiene un diagnóstico correcto, lo que les permite lleva un vida normal sin complicaciones

Se manifiesta por fases o episodios en los que hay una alteración de la regulación emocional que produce cambios en el estado de ánimo | Dreamstime
Se manifiesta por fases o episodios en los que hay una alteración de la regulación emocional que produce cambios en el estado de ánimo | Dreamstimelarazon

Más de un millón de personas en España sufren trastorno bipolar

Se estima que más de un millón de personas en España sufren trastorno bipolar pero sólo unas 300.000 han sido diagnosticadas correctamente, por lo que uno de cada siete no sabe que padece esta enfermedad mental grave que afecta a los mecanismos que regulan el estado de ánimo. Jerónimo Saiz, jefe de Psiquiatría del Hospital Universitario Ramón y Cajal (Madrid), cuenta a ATUSALUD las características de esta patología mental, cuya aparición se produce entre los 18 años y la mitad de la veintena, aunque el mayor “pico” de prevalencia se da entre los 20 y los 30 años, y los afectados tardan una media de cinco años en ser diagnosticados.

¿Cuáles son los síntomas de la enfermedad?

Se manifiesta por fases o episodios en los que hay una alteración de la regulación emocional que produce cambios en el estado de ánimo. Esta alteración puede producirse en un sentido de elevación (euforia, hiperactividad, desinhibición, exaltación...) y se denomina manía, o si es de baja intensidad hipomanía. El otro polo es el de las fases depresivas con tristeza, pérdida de ilusión, vitalidad y esperanza, decaimiento físico y psíquico. la enfermedad suele aparecer en la juventud y seguir manifestándose, sobre todo si no es tratada, con episodios a lo largo de la vida que pueden llegar a tener repercusiones importantes sobre el autoconcepto, la conducta, la funcionalidad, pudiendo en los casos más graves llegar a requerir la hospitalización.

¿Qué características tiene?

Es una enfermedad crónica, en el sentido de requerir atención y seguir normas de régimen de vida y tratamiento, no solo agudo, en las crisis, sino también preventivo para evitar su repetición. Constituye una patología mental importante, pero que, con seguimiento de las recomendaciones terapéuticas y con los recursos farmacológicos y psicológicos disponibles, es compatible con una vida normal y un desarrollo personal satisfactorio

¿Cómo se diagnostica?

No disponemos de ninguna prueba objetiva ni de laboratorio, ni radiológica, ni de ningún otro tipo. Esto complica generalmente llegar al diagnóstico y lo retrasa a veces durante años que tratamiento hay que seguir se utiliza psicoeducación dirigida al enfermo y a su entorno para informar sobre la patología y cómo afrontarla, hay medicamentos que se usan para tratar las fases maniacas y depresivas, pero también y sobre todo como estabilizadores para prevenir nuevas recaídas, de este grupo el más característico son las sales de litio, aunque hay otros. La ayuda psicológica es también muy relevante y por ejemplo en las fases depresivas es un complemento muy útil. Un régimen de vida ordenado, dormir lo suficiente, actividad física, evitar alcohol y drogas y una red de relaciones personales estable son muy valiosos

¿Qué pasa si no se ajusta uno a la terapia?

Como cualquier enfermedad sin buen tratamiento la evolución es peor, con más fases de sintomatología activa, déficits en distintos ámbitos, complicaciones como el consumir alcohol e incluso un deterioro de la salud física

¿Cómo se consigue una buena calidad de vida con la patología silente/crónica?

No es tan frecuente en esta enfermedad la patología silente/crónica, pero hay desde luego mucho que hacer, incluso en casos muy graves, a través de la rehabilitación psico-social y confiamos también en los progresos de la investigación.

¿Qué se debe hacer para no estigmatizar a los pacientes?

Pensar que es una enfermedad como otra cualquiera de la que los afectados son víctimas, nunca culpables.