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Las elecciones del Brexit ante la incertidumbre
Por Luis Lorente
El 8 de junio se celebrarán elecciones anticipadas en Reino Unido. Un adelanto electoral oportunista por parte de la primera ministra, que contaba con mayoría absoluta, y quiso aprovechar un momento en el que los partidos rivales estaban con problemas internos: el UKIP completamente destruido, los liberales en horas muy bajas, y los laboristas con un líder muy cuestionado. Los sondeos señalaban que los conservadores iban a obtener una mayoría amplísima. Sin embargo en la fase final de la campaña, los laboristas han subido mucho en las encuestas, hasta el punto de que algunas encuestadoras, señalan que los conservadores pueden perder la mayoría en el parlamento.
Es muy complicado hacer una predicción, puesto que el sistema electoral británico es de circunscripciones uninominales. 650 diputados en 650 distritos electorales, a una única vuelta (sale elegido diputado del distrito el más votado) de tal forma que además de la campaña nacional, hay campañas locales, que pueden hacer que el comportamiento electoral en un distrito no sea igual que en el distrito vecino.
La encuestadora que señala un cierto empate a la que los medios españoles han hecho referencia, es YouGov. Me gustaría hacer varias matizaciones:
1) Como decía, se eligen 650 diputados en 650 circunscripciones, a una única vuelta: sale elegido diputado el más votado. Eso quiere decir que un resultado como el que da YouGov 42%-38%, convenientemente distribuido en las circunscripciones puede dar una mayoría absoluta. De hecho los laboristas en 2010 con 8,6 millones de votos y un 29% tuvieron 258 escaños, y en 2015, con 9,4 millones y cerca de un 31% tuvieron 232 escaños. Los conservadores en 2010 tuvieron 36% de los votos y 307 y en 2015 un 37% y 331, y mayoría absoluta.
2) En unas 200 circunscripciones (muchas de ellas de las llamadas “indecisas” o “escaños marginales”), el partido UKIP no se presenta, por lo que es muy de esperar que la mayor parte de los votos del UKIP se vayan a los conservadores. Lo mismo ocurre a los verdes, aunque en menor medida, ese voto irá a los laboristas.
3) YouGov metió la pata hasta el fondo en las últimas elecciones generales, pronosticando casi un empate entre conservadores y laboristas, frente al resultado real que fue mayoría absoluta conservadora. Es muy probable que los conservadores metan mucho miedo a la población diciendo que si ellos no gobiernan, gobernarán los laboristas con el apoyo de los nacionalistas escoceses (ya he visto portadas en ese sentido). En 2015, a David Cameron ese discurso le funcionó a la perfección en determinadas zonas clave de Inglaterra: consiguió atrapar a los laboristas entre dos nacionalismos: en Escocia quedaron destruidos por el SNP y en Inglaterra su crecimiento quedó muy mermado por un voto nacionalista inglés a los conservadores de última hora.
Puede ser que YouGov acierte y Corbyn de la sorpresa. Pero yo tengo mis más que serias dudas de que eso vaya a ocurrir. Aunque sería de justicia que Theresa May pague por su oportunismo.
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