Salud
¿Migraña o jaqueca? ¿Qué puedo hacer?
La persona que sufre de migrañas o jaquecas debe aprender a vivir con ello; porque forma parte de su vida. Hoy por hoy no tiene tratamiento que la haga desaparecer. Aunque sí que hay buenos fármacos para controlarla satisfactoriamente.
A continuación, el Dr. Oriol Franch, Jefe del Servicio de Neurología del Hospital Ruber Internacional, nos da las claves para identificar esta patología y los últimos avances para tratarla.
1. ¿Qué diferencia hay entre jaqueca y migraña?
Ninguna. Los dos términos hacen referencia al dolor que se localiza en una mitad de la cabeza.
Migraña o hemicránea proviene del griego, y jaqueca del árabe. Aunque se utilizan ambos términos para hacer referencia a un dolor de cabeza, en realidad corresponden a una enfermedad crónica caracterizada por dolores de cabeza recurrentes. El dolor suele ser unilateral, aunque puede ser bilateral. El dolor característicamente es pulsátil e intenso. La luz, los ruidos y el ejercicio físico suelen intensificar el dolor. Es frecuente que se acompañe de nauseas y vómitos.
La enfermedad evoluciona con episodios de dolor agudo (crisis migrañosas) intercalados por periodos libres de síntomas. Una crisis migrañosa suele durar entre 4 y 72 horas, si no se utiliza ningún tratamiento. La frecuencia de las crisis es muy variable. Puede oscilar entre un episodio o menos al mes, o a ser casi diarias (migraña crónica). Es una enfermedad muy frecuente que afecta a un 15% de la población, predominando en la mujer.
2. ¿Cuál puede ser la causa de tener jaqueca o migraña?
La migrañ̃a es probablemente de origen gené́tico. En una persona predispuesta una crisis migrañosa puede aparecer espontáneamente o puede ser inducida por algún factor.
Es conocido que pueden existir factores desencadenantes de un episodio de migraña tales como la tensión emocional, el estrés y el cansancio, sobre todo cuando está originado por falta de sueño. En ocasiones el factor precipitante de un episodio de migraña consiste en un fenómeno de retirada, después de acontecimientos estresantes o en vacaciones.
Otros factores conocidos son menstruación, trastornos emocionales, cambios atmosféricos, cambios de iluminación, insomnio, tabaquismo, determinados alimentos, algunos humos u olores, y ejercicio físico violento. El vino y otras bebidas alcohólicas también pueden provocar una crisis. Entre los alimentos que con mayor frecuencia pueden facilitar la aparición de una crisis migrañosa están quesos, embutidos, ahumados, frutos secos, chocolate, grasas animales, salazones, enlatados, mermelada comercial, tomate comercial y ciertos aditivos.
3. ¿Qué se puede hacer para aliviar el dolor y qué puede aumentarlo?
En primer lugar evitar los factores precipitantes conocidos para intentar prevenir una crisis migrañosa. El tratamiento farmacológico debe ser individualizado. Por esta razón, en el caso de dolores de cabeza es conveniente consultar con un neurólogo.
Los antiinflamatorios no esteroideos y los triptanes son fármacos habitualmente útiles para el tratamiento de una crisis migrañosa. La intensidad del dolor puede aumentar por la luz, los ruidos y el ejercicio físico. La frecuencia de los episodios dolorosos puede aumentar por abuso de analgésicos.
4. ¿Qué avances médicos se están desarrollando para aliviar las jaquecas y las migrañas?
Desde hace años disponemos de fármacos que han demostrado su eficacia en las crisis dolorosas. Los triptanes (sumatriptán, zolmitriptán, naratriptán, almotriptán, eletriptán, rizatriptán y frovatriptán) son un grupo de fármacos que se emplean en el tratamiento del ataque agudo de migraña.
En los pacientes con crisis migrañosas frecuentes, significativa interferencia de los dolores de cabeza en la actividad diaria, medicaciones agudas ineficaces o contraindicadas, o sobreutilizadas o efectos secundarios de las medicaciones agudas, se utilizan tratamientos preventivos. Desde hace años sabemos que fármacos utilizados para el tratamiento de otras enfermedades (ej. antiepilépticos, antidepresivos, antihipertensivos), también pueden ser útiles para la prevención de los episodios dolorosos.
En los últimos años se han desarrollado varios anticuerpos monoclonales que consiguen modificar la actividad química del cerebro actuando sobre el péptido relacionado con el gen de la calcitonina (CGRP), que tiene directa relación con el dolor, y la sensibilidad al sonido y la luz característicos de la migraña. Se han diseñado tres contra esta molécula (galcanezumab, eptinezumab, fremanezumab) y uno contra el receptor (erenumab), para administración por vía intravenosa o subcutánea. Los datos publicados señalan que estos fármacos tienen mayor eficacia y tolerancia que los tratamientos preventivos utilizados en la actualidad. Se espera que en los próximos meses puedan estar disponibles.
✕
Accede a tu cuenta para comentar