Champions League

Portugal

Cristiano descansa cada cuatro años

El técnico del Real Madrid, Carlo Ancelotti y los jugadores Pepe y Cristiano Ronaldo, durante el entrenamiento de hoy
El técnico del Real Madrid, Carlo Ancelotti y los jugadores Pepe y Cristiano Ronaldo, durante el entrenamiento de hoylarazon

Las pruebas médicas reflejan que la contractura está curada, pero el jugador no se sintió cómodo durante el entrenamiento e impera la prudencia.

Si la final de la «Champions» fuera mañana, Cristiano sería titular, pero es el Valladolid el que visita el Bernabéu en la decimoquinta jornada de Liga y ni Ronaldo ni el Madrid tienen prisa: «Está completamente recuperado, la ecografía estaba limpia, pero se entrenó y no estaba cómodo. Entre él y nosotros decidimos que no jugase. No vamos a tomar riesgos», anunciaba Ancelotti. Quiere a su estrella a pleno rendimiento cuando la temporada se ponga cuesta arriba y no es ningún drama prescindir de él ahora que hay un tramo llano en el calendario. Después del Valladolid aparece la eliminatoria de Copa del Rey ante el Olimpic de Xátiva –para la que el portugués está sancionado– y la sexta jornada de la Liga de Campeones ante el Copenhague, con nada en juego. Allí, quizá «CR7» quiera probarse y mantener su primer puesto en la tabla de goleadores. Después llegará la visita a Osasuna, la fecha del calendario en la que el propio Ancelotti marcó el fin del descanso para Ronaldo: «Así tendrá 15 días para preparar el próximo partido de Liga», insistía el italiano, que tiene muy claro en qué manos está su futuro y el del equipo.

Con las molestias ante el Almería y su baja ante el Galatasaray, Cristiano comenzó su pausa más larga en más de cuatro años. Fue el 30 de septiembre de 2009 cuando una entrada de Diawara en un choque ante el Olympique de Marsella le machacó el tobillo. Fueron 55 días de baja, aunque en medio reapareció con su Selección y recayó de sus problemas en la articulación. Pellegrini lo perdió durante seis partidos de Liga, dos de Copa del Rey y dos de Liga de Campeones en poco menos de dos meses de recuperación. Desde entonces, casi siempre ha estado disponible, jugando más de cincuenta partidos por curso sin importar si eran decisivos o de trámite. No le gusta parar y trabaja para superarse constantemente: «Intento cometer muy pocos errores durante el año en mi preparación y esto me permite estar casi siempre bien», decía hace poco en la Cope. Cuida su cuerpo al detalle y también sabe dosificarse durante los partidos, descansar y reservar fuerzas entre ataque y ataque. Así ha pasado tres temporadas y media casi inmune a los imprevistos. En Almería sintió que algo no iba del todo bien en la parte posterior del muslo izquierdo y enseguida pidió el cambio. No había nada roto, pero en todo este tiempo, además de sumar minutos y marcar goles, ha ganado en experiencia y decidió no forzar.

Lo mismo sucedió ayer en Valdebebas cuando el técnico, el futbolista y los doctores consensuaron alargar la parada en boxes de la estrella. No hay citas de relumbrón a la vista y es mejor llegar bien a lo importante. No hay prisa ni ganas de precipitarse. Completó el entrenamiento al mismo ritmo que los demás en la previa del Valladolid y los rayos-X no encontraron fisuras en su musculatura, pero las sensaciones no eran perfectas. El técnico insistió en que no estaba lesionado, aunque también insinuó que no había mejor momento para prescindir de su jugador franquicia. Carletto reconoce siempre que se le pregunta que el equipo es distinto sin él, pero también que tiene una plantilla repleta de calidad y su ausencia lleva al resto a dar más de cada uno. No tener a alguien que ha marcado 17 goles en los últimos siete partidos (incluidos los de la repesca con Portugal) se nota en cualquier circunstancia, aunque en la segunda parte de Almería y ante el Galatasaray el Madrid se las apañó más que bien. Hoy será Di María quien ocupe el puesto del «7», con Bale en el otro costado. Para Ancelotti el galés ya ha completado su proceso de adaptación tras su lesión y la llegada a Madrid y está contento con su rendimiento. Más dudas hay en el centro del campo, donde Xabi y Modric tendrán su lugar en busca de una victoria más que mantenga la velocidad de crucero en Liga de los blancos.

El técnico no quiere que la mala racha de su rival de hoy, asomado a los puestos de descenso, lleve a la relajación a sus futbolistas, mientras que no ve tan claros los problemas que, dicen, tiene el Barcelona: «Nosotros tenemos que pensar solamente en nuestro trabajo, no en lo que les pase a ellos. En la Liga han jugado 14 partidos y han ganado 13, y, simplemente, el partido contra el Ajax no fue tan bueno y perdieron. No se puede estar siempre en condiciones óptimas», explicó.

Real Madrid: Diego López; Carvajal, Pepe, Sergio Ramos, Marcelo; Xabi Alonso, Illarramendi; Bale, Modric, Di María; y Benzema.

Real Valladolid: Mariño, Alcatraz, Marc Valiente, Rueda, Peña, Rossi, Álvaro Rubio, Sastre, Larsson, Bergdich y Javi Guerra.

Árbitro: Pérez Montero (Andaluz).

Estadio: Santiago Bernabéu.

Hora: 20:00 (C+Liga y GolT).