Economía dice que España crece al 3,5% en tasa anual

El ministro De Guindos contradice al Banco Central Europeo y no cree necesario investigar la fuga de depósitos de Banco Popular.

El ministro de Economía, Luis de Guindos, aseguró ayer que la aceleración en las exportaciones, la fuerte demanda interna y el impulso en la construcción en el segundo trimestre del año se están traduciendo en un crecimiento del PIB de entre el 3,5% y el 4% en tasa anualizada, por encima de las previsiones del Gobierno. De Guindos indicó que el buen comportamiento de la exportación de mercancías, con un crecimiento récord del 9,8% hasta abril, y la recuperación de la inversión en bienes de equipo son dos señales que marcan el buen desempeño durante el segundo trimestre respecto a los tres primeros meses del año, cuando la economía creció un 0,8%, por lo que adelantó una revisión al alza del cuadro macroeconómico.

«Estamos ante un crecimiento claramente por encima del 3%, lo que se traduce en una revisión de los presupuestos para 2017 y 2018, y en una creación más intensa de empleo de lo que habíamos proyectado», explicó durante su intervención en el seminario «La cuarta revolución. ¿Cómo afecta la agenda digital a la economía y a la industria?», organizado por la Asociación de Periodistas de Información Económica (APIE) y la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP). Más allá de la fortaleza de la economía, el ministro destacó que se trata de un crecimiento «sostenido» que no depende de la construcción o del endeudamiento como demuestra el hecho de que «por quinto año consecutivo se va a registrar superávit de cuenta corriente en la balanza de pagos».

De Guindos advirtió de que el reto es asegurar crecimientos en el entorno del 2,5% durante los próximos cinco años porque aunque «hemos recuperado el nivel de renta previo a la crisis, hemos perdido una década».

Para mantener ese ritmo, señaló las reformas que está impulsando el Ejecutivo para favorecer la transparencia y los controles. En este sentido, destacó el acuerdo con las cooperativas de crédito, que representan entre el 4% y el 5% del sistema financiero español, para mejorar la «gobernanza» económica, la Ley de crédito inmobiliario, el impulso legislativo para regular los organismos supervisores de la competencia (CNMC) y el mercado de valores (CNMV) o la eliminación de trabas administrativas a las empresas para que puedan aumentar su tamaño con vistas a su internacionalización.

El ministro también abordó la caída de Banco Popular, motivado por el hundimiento de la acción y la posterior retirada masiva de depósitos. Cuestionado en varias ocasiones sobre si consideraba pertinente investigar la posible utilización de información privilegiada por parte de inversores mayoristas, entre ellos administraciones públicas, durante la fuga de depósitos, como sugirió el BCE, De Guindos descartó esa posibilidad ya que «quienes sacaron sus depósitos no tuvieron ninguna ventaja».

Por otra parte, los secretarios generales de CC OO y UGT, Ignacio Fernández Toxo y Pepe Alvarez, respectivamente, expresaron ayer en Santander su enfado por el colapso de la negociación salarial con los empresarios.

De hecho, Toxo fue muy claro al afirmar que no tiene ni idea de en qué punto está el diálogo con la patronal. «No sé cómo está y soy uno de los actores», dijo el aún líder de CC OO.

Ambos líderes recordaron que mientras los sindicatos se mueven en una horquilla entre el 1,8% y el 3% de subida, la patronal se mueve en la franja entre el 1% y el 2%, con un 0,5% adicional si se reduce el absentismo, «que según ellos se ha disparado».