El Banco de España «avaló» a Bancaja

En un informe fechado en octubre de 2008, el Banco de España elogió «la competencia» y la «capacidad para afrontar la crisis» de la, por entonces, directiva de Bancaja. En la actualidad, la entidad ha desaparecido en un proceso de integración con Caja Madrid y otras cinco cajas, dando lugar a Bankia, que ha necesitado de más de 20.000 millones de euros en ayudas públicas para garantizar su viabilidad.

Las positivas consideraciones sobre los gestores de Bancaja en 2008 figuran en los informes de inspección del supervisor aportados al juez de la Audiencia Nacional Fernando Andreu, donde ya se alertaba de los riesgo a los que se exponía la caja. En el documento aparecían recogidos algunos de los elementos que con el estallido de la crisis económica acabaron sentenciando a la entidad: «La importante exposición al riesgo crediticio con el sector promotor inmobiliario», así como «la delicada situación de la liquidez» y «la fuerte dependencia de los mercados mayoristas y de capitales», entre otras.

Posteriormente en 2009, el Banco de España volvió a inspeccionar la entidad observando un «notable» aumento del riesgo de impago de su inversión crediticia y la irrupción «con fuerza» de la morosidad. La situación no mejoraba. La última inspección, antes de comenzar su proceso de integración en Bankia, tuvo lugar en el año 2010.

Aurelio Izquierdo, presidente de Bancaja hasta su desaparición y uno de los directivos recomendados por el Banco de España «por su conocimiento del negocio bancario», forma actualmente parte de la lista de 41 personas relacionadas con Bancaja que investiga el magistrado de la Audiencia Nacional José Luis Olivas.