Gobierno de España
La gran mentira de Marlaska: «Del ni yo ni nadie... a la renovación del equipo»
En 10 días, cuatro comparecencias: los hechos desmontan el argumento de que el cese del coronel se debe sólo a un cambio en la cúpula
Más allá de las explicaciones ofrecidas por el ministro del Interior ayer en el Senado, de las que pueda dar hoy en el Congreso y del amparo con el que, al menos hasta el momento, le ha dispensado Moncloa, la realidad de la hemeroteca reciente de Fernando Grande-Marlaska en torno al cese de Pérez de los Cobos, arroja sombras, contradicciones y argumentos poco compatibles con los hechos que se han ido conociendo poco después. Ya le sucedió al ministro de Fomento, José Luis Ábalos, en el arranque de la Legislatura con el denominado «Delcygate»: las distintas versiones que ofreció alrededor de un mismo hecho lo situaron en la diana de todas las críticas y llevaron a la oposición a solicitar una dimisión que nunca se concretó. Ahora es Marlaska el que deberá explicar las razones que le llevaron a mantener unos argumentos cuya veracidad ha quedado en entredicho.
26 de mayo, en Moncloa: «Es un proceso natural de renovación de los equipos»
Al ser preguntado por los motivos del cese del coronel Pérez de los Cobos, Grande-Marlaska descartó en la rueda de Prensa posterior al Consejo de Ministros que este asunto tuviera vinculación con la investigación judicial del 8-M. Hasta en tres ocasiones señaló que el polémico relevo tuvo su origen en el proceso «natural de sustitución» de los que forman parte del «elemento de confianza» del ministro. Lo vinculó con el necesario «impulso» que su departamento quiere dar a través de «remodelaciones» en los distintos equipos. «No tiene nada que ver con otra cosa», añadió.
«Injerencia es la palabra que no conjugaré nunca»
En la sala de Prensa de Moncloa expresó su «respeto» por las opiniones de los agentes y de las asociaciones de jueces, críticos ya en aquellos días con lo sucedido en la cúpula de la Guardia Civil. «La renovación de estos equipos se habían visto paralizados por la pandemia», zanjó. Quiso, en todo caso, dejar claro que no tuvo nunca el informe sobre la investigación judicial del 8-M. Tras 30 años de carrera judicial, argumentó, tiene «muy claro» cuál es la función de los jueces y cuál es su competencia como ministro: «Injerencia es la palabra que no conjugaré nunca».
27 de mayo, en el Congreso: «¿No tenemos derecho a la libre designación?»
Grande-Marlaska reprochó a la oposición a la oposición la instrumentalización que, a su juicio, están haciendo de las Fuerzas de Seguridad y del Poder Judicial. Según la explicación que brindó en la Cámara Baja, el cese de Pérez de los Cobos debe ser enmarcado en la política de «libre designación» de los equipos. «Cuando están ustedes, eso es eficacia y eficiencia; cuando está el PSOE, no tenemos derecho a la libre designación», señaló en respuesta al PP. Al ser interrogado por varias veces por si había ordenó personalmente pedir información sobre el informe y cesar después al coronel, Marlaska esquivó dar una respuesta directa a la cuestión: «No ha habido ni habrá ninguna injerencia mientras sea ministro del Interior. No voy a decir más, hay un informe que desconozco y que está donde debe estar, en la autoridad judicial para que lo valore».
29 de mayo, en el Senado: «Ni yo ni nadie pidió el informe al coronel»
Negación y silencio fueron los dos pilares de las explicaciones dadas por Marlaska en su paso por el Senado para dar cuenta con detalle del cese de Pérez de los Cobos. Dejó muchas cuestiones sin contestar y sobre las acusaciones de «purgas» para nombrar a dedo a sus afines, Grande Marlaska desvinculó de nuevo los relevos en Interior de la investigación abierta por las marchas del 8-M: «Ni yo, ni nadie del ministerio, ni la directora general, ni nadie, solicitó ningún informe ni el acceso al contenido» del mismo, afirmó. Insistió en su mantra de querer abrir una «etapa nueva» a través de una remodelación: «Eso no es un descrédito del departamento». Afirmó que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, no le «obligó, ni le dijo nada» sobre el equipo que iba a constituir porque lo que éste le exige es eficacia, cumplimiento de la ley y del programa». Defendió asimismo a la directora general de la Guardia Civil, María Gámez de la que destacó que ha estado «trabajando permanentemente» en la renovación de la cúpula del Cuerpo y en la seguridad de todos. Tanta fue la insistencia de la oposición que repitió, de nuevo, que «ni este ministro ni nadie del Ministerio ni nadie de la Dirección General de la Guardia Civil, evidentemente del Ministerio del Interior, nadie ha solicitado al coronel Pérez de los Cobos ni el informe ni el acceso al contenido del informe al que usted ha hecho referencia».
2 de junio, en el Senado: «Hemos justificado las razones de la pérdida de confianza»
El ministro regresó ayer en la Cámara Alta a su argumento favorito en esta crisis, según el cual, nadie pidió ese informe. También recalcó que el cese fue por motivos de conformación de los equipos, al tiempo que arremetió contra el PP por los informes «preparados» que elaboraban cuando gobernaban, y bien no llegaban o bien evitaban que «llegaran a la autoridad judicial». «Ni este ministro ni ninguna persona de su departamento han hecho ningún tipo de injerencia», aseguró ayer durante su turno de respuesta a los grupos parlamentarios. Y es que, a su juicio, «lo único que hemos hecho y estamos realizando es una nueva conformación de los equipos», señaló antes de dirigirse al PP para asegurar que la «única diferencia con ustedes es que, cuando perdemos la confianza, justificamos la razón de esa pérdida; lo que pasa es que ustedes la malinterpretan». El ministro avanzó que seguirá conformando equipos con capacidad, neutrales y sin ningún tipo de injerencias, a la vez que respaldó el trabajo de los agentes.
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