El Ejército del Aire alerta de los peligros de estar debajo de una zona de descarga de agua

El Ejército del Aire alerta del peligro que puede suponer para una persona estar cerca de la zona de descarga de agua de los apagafuegos que intentan acabar con los incendios.

España está viviendo una semana complicada llena de incendios debido a la ola de calor que desde el miércoles golpea al país. El incendio que se propaga por las localidades madrileñas de Cadalso de los Vidrios y Cenicientos y parte de la provincia de Toledo ha quemado ya en torno a 4.000 hectáreas, según los últimos datos facilitados por la Delegación del Gobierno en Madrid, y este domingo no podrá ser controlado. Efectivos de los Bomberos, agentes, guardias civiles, policías locales, protecciones civiles y efectos de la Unidad Militar de Mergencias (UME) han estado replegados para controlar los incendios.

Varios apagafuegos (IIFF) han lanzado toneladas de agua sobre las llamas del incendio. Pero también puede ser perjudicial para las personas que estén cerca. Por ello, el Ejército del Aire alerta del peligro que puede suponer para una persona si no se alejan de un IIFF. “Si estás cerca de algún IIFF, aléjate de la zona de descarga de nuestros Apagafuegos del 43Grupo. ¡Es muy peligroso!”, alertaba el Ejército del Aire en su cuenta de Twitter.

En el vídeo, se aprecia cómo se descarga el agua en la zona afectada. La gran cantidad provoca tal impacto que las ramas de los árboles no la soportan, y una persona tampoco soportaría.

El 43 Grupo de Fuerzas Aéreas está formado por 127 personas (45 pilotos, 20 mecánicos y 62 personas de apoyo). Tienen una potencia de 5.000 CV y pueden cargar seis toneladas de agua, con dos tanques con capacidad de tres toneladas cada uno, además de cuatro depósitos de espumante. Protección Civil Madrid explicó con un gráfico cómo son estos aviones y los pasos para que se pongan en funcionamiento para apagar los fuegos.

El avión permite abrir una sola compuerta, en caso de una línea de fuego, o ambas cuando el incendio es centralizado. Primero, reciben el aviso telefónico de la existencia de un incendio. Entre la recepción de la llamada y la salida del avión pueden pasar en torno a quince minutos. Una vez que el 43 Grupo localiza la zona, se posan en el agua y recogen 6.000 litros de agua en tan solo doce segundos y 400 metros, a través de dos orificios del tamaño de una mano. El avión permite abrir una sola compuerta o las dos, dependiendo de cómo sea el incendio. La descarga se puede realizar con o sin un espumante en función de las condiciones del incendio.