Caso Nóos
«Es Diego Torres quien manda y dispone en el Instituto Nóos»
Mario Sorribas, imputado en el «caso Nóos» y ex apoderado de Iñaki Urdangarín, ha decidido plantar cara a Diego Torres con sus mismas armas y ha remitido al juez José Castro varios correos para intentar demostrar que «quien manda y dispone en Nóos» era el ex profesor de Esade, a quien define como «una mala persona», aunque «él y su esposa traten de esconderlo». En un escrito enviado al magistrado el pasado día 2, Sorribas (quien declarará ante el instructor en los juzgados de Palma de Mallorca el próximo 10 de junio) afirma que su intención es desmontar «la avalancha de falsedades pronunciadas por el matrimonio Torres» y desmentir sus «torticeras manifestaciones».
En las misivas, Sorribas consulta a Torres el día a día de los proyectos y en los mismos, según su defensa, el ex socio del duque de Palma despliega «el talento de un buen director de equipos humanos» dando órdenes, autorizando viajes y puliendo la lista de invitados a un evento. «Breve, conciso y siempre en positivo, como deben ser las órdenes de un jefe», apunta en el escrito su abogado. «Más claro, imposible», subraya tras preguntarse quién mandaba en el Instituto Nóos.
Sorribas perfila una de las «habilidades» de Torres, quien «siempre que olfatea el peligro con habilidad zorruna le cuelga el problema a uno de sus empleados» (en referencia a una entrevista con un periodista que rehusa y decide «endosar» a un subordinado).
El ex apoderado del yerno del Rey asegura que la aportación selectiva de correos electrónicos por parte de Torres a la investigación se ha convertido en un «serial» que tiene a «medio país enganchado» e incluso «se sigue con pasión en Hispanoamérica». Sorribas afirma con sorna que desde este punto de vista «está haciendo más por la unidad cultural de los hispanoparlantes que muchas iniciativas costosísimas del Instituto Cervantes».
El abogado niega la «patraña» alentada por Torres de que su cliente se relacionase de forma «autónoma» con el también imputado Carlos García Revenga, secretario de las Infantas y tesorero de Nóos mientras Urdangarín ocupó la presidencia. Se trata, dice, de una información «sesgada, manipulada», pues el papel de Sorribas, recalca, era «a título de administrativo o secretaria». A este respecto aporta 15 correos en los que «queda meridianamente claro quién es el que manda y quién el mandado».
Sorribas no quiere dar la impresión de que con esta iniciativa pretende dar «preeminencia» a Torres frente a Urdangarín en la gestión de Nóos. Y aclara que el hecho de que Torres, «aun siendo inocente de todo delito, sea sin embargo de manera comprobada una mala persona no significa en modo alguno que esta defensa trate de perjudicarle». Sucede, añade, que «de momento no hemos hallado e-mails dirigidos por o al yerno del Rey de España donde dé instrucciones de mando».
Por otro lado, la defensa de la Infanta Cristina ha secundado la oposición de su marido a que el juez permita personarse en el procedimiento como acusación particular a varios concejales socialistas del Ayuntamiento de Valencia, a quienes niega legitimación al no representar «ni a un ayuntamiento ni a un partido político». Los abogados de Doña Cristina creen, además, que su presencia en la causa en la recta final de la investigación «viola el derecho a un procedimiento sin dilaciones indebidas» y causa un «peligro serio de padecer retrasos indebidos».
✕
Accede a tu cuenta para comentar