García Fuster, «la jefa» de las comisiones

La UCO apunta como el papel clave en la «trama» a la secretaria del Grupo Popular en el Ayuntamiento de Valencia

Las investigaciones que la Guardia Civil, a través de la Unidad Central Operativa (UCO), realiza sobre la supuesta financiación irregular del Partido Popular en Valencia han permitido concluir que las actuaciones irregulares se centraban y eran dirigidas por la secretaria del Grupo Popular, María del Carmen García Fuster, según informaron a LA RAZÓN fuentes conocedoras del caso.

Al menos por el momento, no se han podido establecer otras responsabilidades «hacia arriba».

García Fuster fue una de las arrestadas el martes de la semana pasada por orden del juez Víctor Gómez, que, tras tomarle declaración, la puso en libertad con fianza y le mantuvo la condición de investigada (imputada).

Ni sobre Alfonso Grau, que llegó a ser la mano derecha de Rita Barberá y tuvo que dimitir por su implicación en el «caso Nóos» (tanto ante la Guardia Civil como ante el juez ha declarado en condición de testigo), ni sobre la propia ex alcaldesa de Valencia se han hallado evidencias que permitan aportarlas al Tribunal para que actúe según proceda.

Es decir, según las citadas fuentes, que en este punto de las pesquisas las responsabilidades sobre la supuesta financiación irregular concluyen, como eje central de la «trama», en la citada García Fuster.

Otra cosa, agregaron, son las sospechas que puedan tener unos y otros y su plasmación en los medios de comunicación.

Lo que ha investigado la UCO es si las «donaciones» de 1.000 euros que los miembros del Grupo Popular y asesores hacían para fines electorales, y que les eran devueltas en dos billetes de 500 euros, cuya procedencia se trata de determinar, constituyen realmente un caso de financiación irregular.

De hecho, era García Fuster quien controlaba las cuentas bancarias del partido.

También tenía acceso a las mismas el actual portavoz del Grupo Municipal, Alfonso Novo, dado que en el mandato anterior era el presidente del PP de la ciudad de Valencia.

Este fue el motivo por el que Novo fue notificado para declarar ante la Guardia Civil en el mismo día del registro del grupo municipal. En la misma circunstancia está la secretaria de García Fuster, que recaudaba el dinero por orden de su jefa.

Ambos también abrirán la lista de cargos del Ayuntamiento de Valencia que presten declaración ante su señoría, y lo harán concretamente mañana.

Carmen García Fuster fue la única persona detenida en la operación realizada en el Ayuntamiento de Valencia, ya que la ex edil María José Alcón, que también fue arrestada, ya no formaba parte del grupo municipal.

La noticia de su detención corrió como la pólvora entre los propios compañeros del grupo.

También las pesquisas de la UCO se centraron en el despacho de la citada García Fuster, del que la UCO retiró varios libros y documentos. Por lo que respecta al resto de despachos, la Guardia Civil, al parecer, sólo se llevó copia de los correos electrónicos que había en los ordenadores, pero no así documentación.

García Fuster, al igual que el resto de los detenidos e investigados, no quisieron prestar declaración ni ante los guardias, ni ante su señoría hasta que conozcan los cargos por los que se les investiga.

En cualquier caso, parece ser que ninguno de los ediles y ex ediles que ya han prestado declaración ha admitido que García Fuster o cualquier otra persona les devolviera cantidad monetaria alguna. Todos aseguran que «a mí, no».

El testimonio discordante lo dan cuatro asesores del grupo municipal, que se negaron a realizar este ingresos. Son ellos los que sí sustentan la acusación de que se les pidió que aportaran los mil euros mediante transferencia bancaria, y que luego les serían devueltos «en efectivo», sostienen dichos testigos.

Fuentes de la investigación confirmaron también a LA RAZÓN que la Guardia Civil tenía muy acreditadas las acusaciones y que por ello el juez había citado a declarar a todos los investigados que habían desfilado ante los agentes de la UCO.

Asesora y secretaria del PP

García Fuster era, hasta la pasada semana cuando fue cesada, asesora y secretaria del Grupo Municipal del PP, y pertenecía al gabinete de Alcaldía en el mandato anterior bajo las órdenes directas de Rita Barberá. De hecho, fue prácticamente la mano derecha de la ex alcaldesa valenciana y la que manejaba las cuentas del grupo municipal. Su sueldo superaba los 60.000 euros anuales. Es la hermana del ex senador popular y ex consejero del BFA José Rafael. Fue puesta en libertad bajo fianza.