La violencia de género, al margen

Los secretarios generales de PP y Vox se reunirán el martes para acercar posturas tras orillar la polémica por la ley de violencia de género y abordar ayer la necesidad de una auditoría en la Junta y de desmontar la administración paralela socialista.

PP y Vox acercan posturas para conseguir que el cambio de gobierno sea una realidad en Andalucía tras casi cuatro décadas de mandatos socialistas. Mientras arreciaba la polémica por los cambios en la ley de violencia de género que exige la formación de Santiago Abascal, los secretarios generales de ambas formaciones –Teodoro García Egea y Javier Ortega Smith– hablaron ayer telefónicamente para intentar avanzar en el acuerdo que facilite la investidura como nuevo presidente andaluz del popular Juanma Moreno. Y lo hicieron orillando el espinoso asunto de la violencia de género y abordando otras cuestiones que sí están entre los objetivos de ambas formaciones, como la necesidad de impulsar una auditoría de los gastos de la Junta de Andalucía durante el mandato de Susana Díaz, la optimización de los recursos de la Administración andaluza, el desmontaje de la «administración paralela» consolidada tras casi 40 años de gestión socialista y el fomento de la inversión y del emprendimiento.

Tras veinte minutos de conversación «afable», según fuentes del PP, García Egea y Ortega se emplazaron para reunirse el próximo martes «para continuar desarrollando los puntos de acuerdo» de cara a una posible investidura de Moreno que consiga convertir a Andalucía «en una de las regiones más prósperas de Europa». Según esas mismas fuentes, el «número dos» del PP hizo hincapié a su homónimo de Vox en la «necesidad de articular una mayoría» en el Parlamento andaluz que permita la constitución de un Gobierno encabezado por el candidato del PP. Un objetivo para el que, además, necesitan el apoyo de Ciudadanos, que ya ha cerrado un pacto programático con los populares para hacer realidad el cambio en Andalucía.

Precisamente a Cs hizo referencia Ortega en su valoración de esa conversación a través de su cuenta de Twitter, en la que dijo que Vox «mantiene su voluntad de facilitar un cambio real en Andalucía y para ello es un paso importante sentarse a hablar. «Esperamos que @CiudadanosCs también acuda a este encuentro», añadió emplazando a la formación naranja a sumarse a la reunión.

En esa conversación telefónica García Egea no puso sobre la mesa la anunciada oferta del PP de ampliar las ayudas a todas las víctimas de la violencia familiar, después de que Vox reclamase como condición sine qua non para obtener su apoyo la sustitución de la ley de violencia de género por otra «realmente eficaz», al entender que la actual atenta contra la Constitución, el Estado de Derecho, el principio de igualdad entre todos los españoles y la presunción de inocencia.

Fuentes de la dirección nacional del PP desvinculan su propuesta de extender las ayudas a todas las víctimas de la violencia familiar de las exigencias de Vox al respecto. «Nuestro compromiso por apoyar a todas las víctimas de la violencias, sea cual sea su sexo y atendiendo a las particularidades de cada caso es innegable –subrayan–. Es lo que hemos dicho siempre. Nadie va a dar lecciones sobre la violencia de género al PP, que impulsó el pacto sobre violencia de género y lo dotó con 1.000 millones de euros».

Su propuesta, aclaran desde la dirección nacional, se llevaría a cabo «sin renunciar a un solo euro para las mujeres ni a una sola coma del pacto contra la violencia de género». Lejos de derogar esa norma y desproteger a las víctimas, añaden, «se trata de proteger también a otras víctimas».

Los cambios, en el Parlamento

Los populares tienen muy presente el acuerdo programático rubricado con Cs, en el que ambas formaciones se comprometen a aumentar presupuestariamente todas las medidas incluidas en la ley de violencia de género. De ahí que insistan: «No vamos a negociar nada fuera del pacto». Y remiten cualquier modificación legislativa al futuro Parlamento andaluz. «Tendrán que ser los diputados los que negocien todas esas medidas. No tiene sentido firmar ahora nada».

Fuentes de Vox aseguraron a este periódico que su formación «no realizará más declaraciones ni revelará más detalles» del anunciado encuentro con el PP «hasta que se produzca».