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Policías reclaman tener derecho a huelga para pedir la equiparación

Sus homólogos europeos tampoco tienen permitido realizar paros pero sí reciben a cambio una retribución al entender que el derecho fundamental está vulnerado.

75.000 personas llenaron las calles de Madrid el pasado sábado
75.000 personas llenaron las calles de Madrid el pasado sábadolarazon

Sus homólogos europeos tampoco tienen permitido realizar paros pero sí reciben a cambio una retribución al entender que el derecho fundamental está vulnerado.

Las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado llenaron las calles en una manifestación histórica y multitudinaria el pasado día 18 de noviembre para pedir la equiparación salarial. Tienen el derecho a manifestarse pero no a huelga; un derecho que querrían lograr para así poder reclamar el agravio comparativo que suponen sus salarios con el del resto de policías autonómicas. Las policías europeas no tienen tampoco reconocido el derecho a huelga, pero a cambio reciben una retribución al tener ese derecho fundamental coartado.

Por ello, el sindicato policial Alternativa Sindical Policial (ASP) ha registrado una iniciativa –con el interés de fortalecer la unidad de acción– en el Congreso, en el Senado y en el Defensor del Pueblo para que se les reconozca el derecho a huelga parcial y controlada y poder conseguir de este modo la equiparación.

En el escrito registrado en el Parlamento piden que «se respete la igualdad» de los policías nacionales con respecto al conjunto de los ciudadanos españoles, «sin que medie ningún tipo de discriminación» que al entender de la organización sindical se pone de manifiesto «al negarse el ejercicio del derecho de huelga» que se establece en la Carta Magna. Por ello piden al poder legislativo «la necesidad de elaborar una norma» con rango de ley o modificar la ya existente (Ley Orgánica 2/1968, de 13 de marzo de Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado) con el objeto de que «se recoja el derecho al ejercicio de la huelga, aun cuando para ello se establecieren limitaciones, como así se hace con el conjunto de esos trabajadores nacionales y extranjeros radicados en España, cuando se establecen los denominados servicios mínimos», y dado el caso de que no fueren reconocidos les gratifique al igual que a las policías europeas con la percepción de la cuantía de compensación por la vulneración de dicho derecho. Defienden que «todos somos iguales ante la ley y si no se hace respetar éste derecho fundamental, existe una clara discriminación laboral hacia los policías, integrantes de un instituto armado de naturaleza civil».

Existe un precedente en Argentina, en diciembre de 2013, en el que los policías ejercieron el derecho a huelga como reclamo de mejoras salariales, un hecho que provocó numerosos saqueos e inseguridad, pero que sirvió como elemento de presión y consiguieron sus reclamaciones. Por ello, y para evitar los incidentes y dañar la seguridad, los policías insisten en que ese derecho a huelga sea «parcial y controlado».

El Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) avaló en 2015 las restricciones al ejercicio de huelga para los miembros de la Ertzaintza por tratarse de un cuerpo policial para el que se contempla esa posibilidad. Estimó entonces, después de que el sindicato ERNE de la Ertzaintza lo reclamara, que la prohibición de ese derecho «no constituye una injerencia injustificada» porque no estaba reconocido en el código europeo de ética de la Policía. El Tribunal de Estrasburgo daba la razón a España después de que las policías autonómicas se quejaran de la imposibilidad de organizar un paro en 2004 para reclamar a la dirección vehículos blindados y chalecos antibalas.