Rajoy negocia con Rubalcaba para cerrar la ley para aforar al Rey

Se estudia que la norma surja del Congreso con una proposición de ley del Grupo Popular o conjunta con el PSOE, que podría tramitarse de urgencia y evitar así el trámite del Consejo de Ministros

Una ley orgánica regulando la protección jurídica y el aforamiento de Su Majestad el Rey Don Juan Carlos podría estar aprobada en julio. Igual que ha ocurrido con la regulación de la abdicación, y su votación en las Cortes Generales, también en esta cuestión el Gobierno quiere contar con el acuerdo y el apoyo del secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba. «Es fundamental», sostienen en Moncloa. El Congreso extraordinario del PSOE, que cerrará la etapa de Rubalcaba como jefe de la oposición, se ha retrasado al 26 y 27 de julio.

Con ese acuerdo entre los dos principales partidos, y sin necesidad de forzar la máquina, esta iniciativa legislativa podría estar aprobada en julio, a principios de mes, incluso, siguiendo un calendario parecido al que se ha aplicado con la ley orgánica sobre la renuncia de Don Juan Carlos que se vota la semana que viene en el Congreso, y la siguiente en el Senado.

En junio, en el Congreso hay convocadas sesiones plenarias todas las semanas, aunque la que comienza el martes 17 queda marcada por el acto de proclamación del Príncipe de Asturias como Felipe VI. En julio el Senado entra ya en periodo de vacaciones, pero se puede convocar un Pleno extraordinario para refrendar la votación de la Cámara Baja.

Entre las posibilidades, en Moncloa barajan que la ley orgánica pudiese nacer del Parlamento, como proposición de ley del Grupo Popular, o conjunta con el PSOE, de darse el caso. Esto ahorraría el paso por el Consejo de Ministros, no haría falta tampoco informe de órganos consultivos, y el trámite podría ser también de urgencia y en lectura única, igual que con la abdicación, lo que agilizaría los plazos. El Gobierno insiste en negar que haya habido improvisación ni en el calendario de la abdicación ni en la gestión del desarrollo normativo, y también insiste en que no plantea ningún problema el hecho de que Don Juan Carlos vaya a estar un tiempo sin una protección jurídica especial con la proclamación del nuevo Rey, una vez que pierda la inviolabilidad que le reconoce la Constitución como Jefe del Estado.

Ayer, la vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría, recordó que la inmunidad no se pierde con carácter retroactivo y confirmó que el Gobierno está trabajando en su futuro aforamiento. «La inviolabilidad por el ejercicio de su cargo durante el tiempo en que ha sido Rey permanece. Que deje de ser inviolable pro futuro no quiere decir que recupere responsabilidad sobre las actuaciones anteriores», precisó.

La vicepresidenta fue quien gestionó con el jefe de la Casa del Rey, Rafael Spottorno, el anuncio de la abdicación de Don Juan Carlos, después de que fuese informado el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy. Y ahora es ella la que está dirigiendo en primera persona el desarrollo normativo necesario para responder a la situación en la que queda Don Juan Carlos una vez que pierda su condición de Rey. Sobre la regulación del aforamiento, de momento Sáenz de Santamaría dejó ayer el escenario abierto. «En cuanto tengamos la fórmula, el contenido y los plazos lo comunicaremos», indicó. Sólo precisó que exige ley orgánica y que tiene que ser ratificada por las Cortes Generales.

A principios de abril Justicia incluyó en la reforma de la Ley Orgánica del Poder Judicial la novedad de que la Reina y los Príncipes de Asturias sean aforados, lo que supone que en caso de ser procesados, sólo podrían ser juzgados por el Tribunal Supremo.

Tratamiento

La vicepresidenta también confirmó que el tratamiento de Don Juan Carlos y Doña Sofía, sus honores o su prevalencia en el protocolo serán regulados por un real decreto que modificará el que existe sobre régimen de títulos, tratamientos y honores de la Familia Real y de los Regentes, y que establece, por ejemplo, que «el padre del Rey continuará vitaliciamente en el uso del título de Conde de Barcelona, con tratamiento de Alteza Real y honores análogos a los que corresponden al Príncipe de Asturias».

Este real decreto podría aprobarse la semana que viene o la siguiente.

La ley orgánica y la proposición de ley

- Ley orgánica: se requiere constitucionalmente para regular materias de gran trascendencia, se aprueba en Consejo de Ministros, y se envía al Parlamento para su aprobación, que exige sea con mayoría absoluta.

- Proposición de ley: la propone un grupo parlamentario, ahorraría el paso del Consejo de Ministros, no haría falta informe de órganos consultivos y el trámite podría ser también de urgencia y en lectura única.