Una casa de muñecas dorada: el extraño look de Dior que triunfa en el desfile de la Alta Costura de París

El impresionante drama de la alta moda de la semana de la Alta Costura de París ha llegado y la casa ha presentado ya su propuesta para la temporada Otoño/Invierno 2019-2020

El impresionante drama de la alta moda de la semana de la Alta Costura de París ha llegado y una de las casas de moda más célebres ha presentado ya su propuesta para la temporada Otoño/Invierno 2019-2020, que concluye el 4 de julio. La pasarela de Christian Dior ha cerrado con un look soprendente por lo bizarro, formado por unas delicadas mallas de encaje negro y una casa de muñecas de oro en la parte superior.

María Grazia Chiuri, directora creativa de Dior, ha revelado que la inspiración central para esta colección han sido las cariátides, figuras femeninas esculpida con función de columna, que representan "el importante papel de apoyo que representan las mujeres tanto en la arquitectura, como en la sociedad".

Pero este "vestido"en concreto está inspirado en la serie artística "Doll Houses"(Casas de muñecas), de la artista y feminista estadounidense Penélope "Penny"Slinger. Como muchas de sus obras, las casas de Slinger pretendía explirar el funcionamiento interno de la psique femenina, la sexualidad y la espiritualidad. Slinger es la última artista pionera con la que Chiuri ha colaborado desde que tomó las riendas de Dior en 2016, habiéndose unido previamente con visionarias como la escritora Chimamanda Ngozi Adichie, la artista Mickalene Thomas y la coreógrafa Martha Graham.

El desfile tuvo lugar en la sede de Dior en París, donde las modelos se abrieron camino a través de un jardín de rosas en flor, que tenía una sensación oscura y ligeramente ominosa. Slinger quiso transformar el espacio en un bosque negro con un enorme árbol retorcido trepando por su famosa escalera. En el centro, un cuarteto de cuerdas integrado solo por mujeres tocó un arreglo del compositor alemán Max Richter. La colección emitió vibraciones góticas de viuda de luto, con vestidos de terciopelo y vestidos de cóctel con cinturas ceñidas, complementados con sombreros y velos.

Por otra parte, la diseñadora quiso rendir un homenaje a la legendaria cineasta Agnès Varda, quien falleció a principios de este año, con una proyección de su corto de 1984 "Les Dites Cariatides", y al escritor, arquitecto y curador estadounidense Bernard Rudofsky como fuente de inspiración. De echo, una de als camisetas (simple, de algodón) llevaba impreso el nombre de una exposición de Rudofsky: "¿La ropa es moderna?".