Heredero de una larga tradición en vehículos polivalentes

Madrid-La progresión de Peugeot en el segmento de los compactos ha sido espectacular en los últimos lustros. Sólo hay que dar un repaso a sus modelos para contar sus éxitos comerciales: 205, 206, 207... un aval suficiente para que ahora, la llegada del 208 prevista para la próxima primavera haya despertado una gran expectación. La firma francesa pretende que el sucesor de esta familia de prestigio marque el inicio de una nueva generación de automóviles en la categoría.

Para ello, se ha creado un modelo que resulta apreciablemente más ligero, ya que ahorra en la báscula 110 kilos. En algunas versiones se sitúa en sólo 975 kilos. Y es más compacto, gracias a los siete centímetros que reduce en su longitud. Pero, en cambio, guarda en su diseño la personalidad de la marca, con unas formas muy características en las que destaca el frontal en forma de cuña que se prolonga con un parabrisas de gran inclinación. Esto le permite un favorable índice de penetración aerodinámica, que influye positivamente en la reducción del consumo de combustible y la emisión de gases a la atmósfera.

Desde el momento de su lanzamiento estará disponible con dos carrocerías, de tres o cinco puertas, como es habitual en los compactos de este tamaño. Otras versiones, como el descapotable, llegarán en un futuro próximo.

Los ingenieros de la casa también han trabajado de manera exhaustiva en el interior, que varía apreciablemente respecto a los anteriores modelos. La posición del conductor es muy agradable, con un volante de pequeño diámetro y todos los controles a la vista. En medio del salpicadero, muy a mano, una pantalla de control táctil sive para ordenar todos los sistemas eléctrónicos del automóvil, incluidos GPS y sonido.

En cuando a motores, Peugeot anuncia nuevas plantas motrices de gasolina en bloque de tres cilindros, con 1,0 y 1,2 litros de cilindrada, que unen bajo consumo y reducción de emisiones. Los datos son 4,3 litros de conusmo y 99 gramos de emisiones.