Eurocopa

Argentina

Vicente del Bosque: «Sigo queriendo ser Busquets»

Vicente del Bosque: «Sigo queriendo ser Busquets»
Vicente del Bosque: «Sigo queriendo ser Busquets»larazon

Madrid- Ha pasado un año y Vicente del Bosque disfruta de su éxito con la misma tranquilidad con la que encaja los malos momentos. «Lo que sucede conviene», acostumbra a decir el seleccionador. Ahora, lo que sucede son premios y felicitaciones en el primer aniversario del Mundial. Pero Vicente no presume.


–Ahora que ha pasado un año, ¿qué recuerdo es el primero que aflora del Mundial?

–La emoción del último día, de ganar el Mundial. Era un sueño de mucha gente y encontramos ese punto de equilibrio entre el optimismo que había y el derrotismo que nos ha acompañado siempre. Llevamos tantos años en el fútbol que nos sentíamos contentos de que el fútbol español llegara a conquistar un Mundial y también por la satisfacción personal de estar en este momento tan feliz dirigiendo a la Selección.


–Después de perder el primer partido contra Suiza, ¿hubo algún momento de duda?
–Las dudas eran razonables. Nos vimos en una situación muy complicada, fue un momento de dolor interno grande. Pero el grupo dio un ejemplo de madurez y nosotros pusimos ese punto de cordura de no volvernos locos, de reflexionar sobre por qué habíamos llegado a Suráfrica. No podíamos dar un bandazo y mantuvimos a los mismos jugadores contra Honduras. Hicimos una autocrítica necesaria.


–¿Cómo llegaban las críticas que empezaron a surgir en España?
–Estábamos informados al detalle. Tenemos muchos defectos, pero también alguna virtud, y una de ellas es que sabemos escuchar, lo que no significa que atendamos a todas las peticiones porque si no te vuelves loco. El fútbol es tan opinable que todo el mundo tiene algo de razón.Una acción nuestra de relevancia fue declararme seguidor de Busquets y decir que me reencarnaría en él. Sirvió de refuerzo para todos en cuanto al sistema y a los jugadores.


–¿Sigue queriendo ser como Busquets si volviera a ser futbolista?

–Sí, sí, claro que sí. Es un jugador que se asemeja o yo me asemejo a él en la forma de juego, en cuanto a la responsabilidad, a sentirse un hombre clave para que el equipo funcione. Cuando yo jugaba, también me sentía servicial para el juego y para los compañeros.


–¿Aquello lo dijo porque era el más débil, el que más críticas había recibido?
–No sé si iban contra él o contra el cuerpo técnico. Se abre el debate del doble pivote y ya sabemos que es opinable. Ese doble pivote que se alterna para iniciar el juego desde atrás o apretar un poco más adelante, lo hacen bien él y Xabi Alonso. Están coordinados. Hay otras fórmulas, pero nosotros hablamos de ésta porque es la que ha dado resultados.


–¿Lleva la cuenta de los actos a los que ha acudido?

–No. Han sido muchos días de devolver el cariño que nos ha demostrado todo el mundo.


–Desde LA RAZÓN se le ha premiado y ahora homenajeado...

–Sí, sí, ha sido mucho reconocimiento dirigido a mí, pero los verdaderos protagonistas eran los jugadores.


–Ha estado casi más tiempo en homenajes que en el césped. ¿Se distrae?
–No, no. Tengo muy claro cuál es la tarea principal, el seguimiento de nuestros jugadores, de los rivales, prepararnos lo mejor posible... Independientemente del resultado que hayamos obtenido el día de Portugal o el de Argentina, no ha sido por una distracción, mis pensamientos han estado en lo que es realmente importante. Todo esto ha sido cumplir con otra de mis obligaciones, que es la de atender a todo el mundo, pero no nos hemos olvidado de que lo más importante es que tenemos por delante un reto que cumplir.


–Se acerca la Eurocopa, ¿es posible encadenar tres títulos, algo que nadie ha conseguido?
–En eso estamos,pero tenemos al lado gigantes que han estado adormilados: Portugal, Inglaterra, Francia e Italia, que son potencias. Aparte de Holanda y Alemania, que son segundo y tercero del Mundial, respectivamente.


–¿Tranquiliza ver que hay relevo, que la sub'21 también gana?
–Claro, hay una mayor competencia. Lo importante es que hay una base estable muy grande que nos permite no tener que hacer una revolución traumática. Estaremos pendientes de los que salgan, como hemos estado en los tres últimos años, cambiando poco a poco. No se ha percibido mucho, pero ha venido Mata, Javi Martínez, Piqué, Busquets, Llorente; ha habido ocho o nueve jugadores que han venido muy jóvenes a la Selección.


–¿Cuál será su futuro después de la Eurocopa?
–No lo sé, no quiero hacer planes, intentaremos cumplir con nuestra tarea, pero no tenemos ningún plan de antemano. La clasificación para Brasil será otra historia y si después del Europeo la Federación está contenta con nosotros y nosotros nos sentimos emocionados con el trabajo, las condiciones se tienen que dar.


–¿Y con el relevo de algunos jugadores? A Puyol le convenció para que continuara después del Mundial, hay otros que son mayores, como Capdevila…
–Han tenido con nosotros un comportamiento fantástico. Vamos a tomar las decisiones justas, más que por edad por el rendimiento en sus clubes. Si Capdevila y Marchena siguen jugando, si sigue funcionando Puyol, o los que están en esa frontera de los 30, los jóvenes van a tener una dificultad. Si no, daremos los pasos adelante que tenemos que dar.


–¿La situación de Silva en el Mundial es la que más le dolió?
–No. Es que es imposible ser justos con 23 jugadores que en sus clubes son titulares absolutos. Nosotros no hemos querido ser injustos con nadie, pero puede ser que lo hayamos sido. Puede ser. El asunto más doloroso para nosotros, sin ninguna duda, fue el de Marcos Senna, que no le llevamos al Mundial. También el de Diego López, Güiza, Riera, jugadores que han tenido muy buen rendimiento con nosotros. Pero en la Selección y con la competencia enorme que hay es imposible que aciertes en todo.
 

Del Bosque. (23-IX- 1950. Salamanca)
Cuando a Vicente del Bosque se le pregunta si su hijo Álvaro le «presiona» para ganar la próxima Eurocopa, contesta: «No, hombre. Él quiere que sigamos, se cree que voy a estar toda la vida, pero todo tendrá su límite. Yo le hablo de que llegará un momento en que no seré seleccionador y el piensa que no, que esto es vitalicio».