Garitano hace suyo el discurso de ETA y pide la libertad de sus presos

El último capítulo, por ahora, del envalentonamiento del brazo político de la banda lo protagonizó ayer el diputado general de Guipúzcoa, Martín Garitano, de Bildu. Aprovechó su presencia en las fiestas de San Ignacio de Loyola, en Azpeitia, para exigir la derogación de la llamada «doctrina Parot», ya que, según él, supone «la cadena perpetua» para los presos de ETA. Asimismo, reclamó el fin de la dispersión de los reclusos y la legalización de Sortu.

Garitano, pese a tener la obligación de representar a todos los guipuzcoanos, no asistió a las celebraciones religiosas y se quedó fuera del templo (con los representantes de Etxerat, la asociación de los familiares de los presos de la banda). Justificó sus peticiones en lo que califica de «ciclo político nuevo», que vive el País Vasco.

«Siguen siendo los mismos»
La Diputación de Guipúzcoa, enfatizó, pidió también el fin de la dispersión, la puesta en libertad de los presos enfermos y de los que estén «en condiciones de alcanzar la libertad condicional». Afirmó que «hay un sector político importante, que sigue ilegalizado» (pese a que Bildu ha podido presentarse sin problemas a las elecciones) y pidió que Sortu (sin citar a esta formación) sea inscrita en el Registro de Partidos.

Los tres principales sindicatos policiales, SUP, CEP y UFP, subrayaron ayer que la actuación de Garitano pone de manifiesto que los integrantes de Bildu «siguen siendo los mismos» que los que formaban la antigua Batasuna. Por ello, reclamaron que la Fiscalía y la Abogacía del Estado inicien un proceso en contra de la coalición. El portavoz del SUP, José María Benito, señaló que los pasos de Bildu demuestran que el Tribunal Constitucional cometió «un error» al permitir concurrir a sus listas a las elecciones. A su juicio, las manifestaciones de Garitano constituyen «un elemento más» para reclamar la ilegalización de la coalición. «No deja de ser una provocación más para las víctimas, otra más a la que nos tienen acostumbrados». Desde la Confederación Española de la Policía, su vicesecretario, Lorenzo Nebreda, destacó que, a estas alturas, los actos de la coalición «ya no sorprenden» porque «nadie discute, salvo algunos miembros del Tribunal Constitucional, que Bildu es Batasuna». Las Fuerzas de Seguridad están «expectantes a que, pasadas las elecciones, alguien con sensatez pueda poner un poquito de cordura» y «ataje este desaguisado».