ANÁLISIS: Priorizar al militar no a la ONU por Diego Mazón

La Defensa nacional ocupa para ambos partidos el último lugar de su programa. Una coincidencia que no es la única pero sí la más llamativa si estos se estructuran según la importancia que le dan a unas u otras políticas en su plan de futuro para España. Ambos también incluyen esta política dentro de la de Exteriores, reseñable en tanto en cuanto los ejércitos y la Armada son cada vez más uno de los elementos fundamentales de la acción exterior del Estado; y los dos partidos, además, entroncan la Defensa no sólo como una acción puramente militar, sino como un concepto estratégico que incluye desde la inteligencia hasta las soluciones económicas o energéticas.

Hasta ahí las coincidencias. El programa del PSOE para Defensa (término que ni siquiera utiliza en su encabezado en beneficio de un genérico «Seguridad») pasea por lugares comunes asépticos, llenos de generalidades apoyadas en las Naciones Unidas y un pacifismo utópico.

Mientras el PSOE defiende el pleno desarrollo de la Estrategia de Seguridad Española elaborada por Javier Solana, el PP propone su redefinición en busca de tres objetivos: seguridad de las Fuerzas Armadas, operatividad internacional y reconocimiento del papel de los militares y sus familias. Es precisamente en este último punto (los militares, sus familias y el reconocimiento social que merecen) donde el programa de los populares hace más hincapié, recogiendo una de las principales aspiraciones de los militares: «Pondremos en marcha un plan de asistencia familiar para facilitar la movilidad geográfica, la vivienda, la educación, la sanidad, el idioma, la conciliación y la seguridad de los cuarteles y sus residentes». Si esto se traduce, como parece, en una oficina de apoyo al personal en condiciones (a la americana), es la propuesta más interesante de los dos programas. En el segundo punto de las medidas prometidas por el PP se apunta la necesidad de la colaboración público-privada en la gestión de proyectos y el sostenimiento de las capacidades de Defensa, es decir, el sostenimiento no sólo de las actuales capacidades armamentísticas y de la propia industria, sino de la evolución lógica de unos ejércitos y una Armada que no pueden estancarse. Promete asimismo la revisión de la Ley de la Carrera Militar, algo que se antoja tan fundamental como complicado, y la nacionalización de iberoamericanos que hayan cumplido dos años de servicio en las Fuerzas Armadas.

Diego Mazón
Red. jefe de España y corresponsal de Defensa

LO QUE DICE EL PP
- Plan de asistencia familiar.
- Revisión de la Ley de Carrera Militar.
- Colaboración público-privada en gestión de proyectos

LO QUE DICE EL PSOE
- Implantar la Estrategia de Segudidad.
- Esfuerzos en no proliferación, el desarme y el control de armamento.