Londres

Benedicto XVI defenderá la libertad religiosa

La Razón
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El Papa llega con un mensaje para los políticos: para construir una gran sociedad se ha de encontrar un equilibrio entre la equidad y la libertad religiosa. El discurso que el Pontífice pronunciará en Westminster Hall estará ligado, por ejemplo, a la Ley de Igualdad de 2007, que ha perjudicado la libertad de muchas entidades religiosas. El caso más significativo fue el de las agencias de adopción católicas que se negaban a entregar niños a parejas homosexuales. Trece centros prestigiosos tuvieron que elegir entre dar la espalda a sus principios o el cierre. El Papa advertirá sobre las consecuencias de un programa hostil para la identidad religiosa. «Si su mensaje hace pensar a los políticos sobre este tema, el viaje habrá sido un éxito», explica a LA RAZÓN Austen Ivereigh, uno de los coordinadores del grupo «Catholic Voices», creado de cara a la visita papal para presentar públicamente la perspectiva católica de modo atractivo a los medios de comunicación. No son portavoces de la Conferencia Episcopal, pero su labor excepcional se ha ganado la bendición de los obispos.

Según Ivereigh, el Santo Padre hablará sobre temas humanos y universales con un lenguaje adecuado para todo el mundo, creyente o no. «No usará, por ejemplo, la palabra "eutanasia", pero acudirá a centros de mayores y su imagen dando muestras de cariño a un anciano valdrá más que mil palabras», afirma Ivereigh.