Prevención

Agua salada pomada y frío contra las picaduras de medusas

Llega el verano y como cada año, cuando se producen altas temperaturas y tras un invierno de pocas lluvias, aparecen en las playas españolas, sobre todo mediterráneas, las molestas medusas que en forma de plagas fondean cerca de la orilla picando a los bañistas. El remedio para las picaduras de estos organismos de cuerpo gelatinoso es agua salada para limpiar la herida, aplicar compresas frías para el dolor y pomada, con antihistamínico o corticoides, para reducir la inflamación.


Por el contrario, el internista del Hospital USP San Camilo de Madrid, el doctor Javier Montero, desmiente que utilizar agua dulce o orina para limpiar la herida pueda servir para mejorar o reducir el dolor. Del mismo modo, afirma en una entrevista a Europa Press, está contraindicado el uso de arena para cubrir o frotar la herida, ya que «solo se va a conseguir extender la erupción cutánea mucho más, porque se va a extender el tóxico». Una vez que no se ha podido prevenir la picadura de la medusa, Montero recuerda que «se trata de una incidencia menor», provocada por una sustancia tóxica que se encuentran en cápsulas en sus tentáculos y que se inyectan en la piel produciendo una erupción. «El síntoma fundamental es el dolor y el picor local en la zona que entra en contacto con el tentáculo», explica. 


La mayoría de las picaduras suelen producirse en brazos y piernas, donde se observa una urticaria que ocasiona una marca como la que produce un látigo, una erosión con pústulas que «provocan un intenso picor y dolor a nivel local donde se encuentra la picadura». «Habitualmente los síntomas no van a pasar de ahí», advierte, sin embargo existe un numero reducido de pacientes que pueden presentar un «shock» anafiláctico por una reacción alérgica al tóxico de la medusa. Recuerda tener especial cuidado los bebés por tener un sistema inmunológico inmaduro, y las personas mayores que presentan patologías de base cardiovascular o están polimedicados.