El Poder Judicial respalda a Alaya ante la campaña de desprestigio del PSOE

Sevilla- A la magistrada Mercedes Alaya le ha salido un aliado en la campaña de desprestigio contra su persona que inició el PSOE desde hace tiempo y que culminó el miércoles con las declaraciones de Alfonso Guerra. El Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) apoyó ayer a la instructora ante las insinuaciones ofensivas que hizo el cabeza de lista del PSOE por Sevilla, que aseguró que «hay una relación fuerte personal entre la jueza y el actual alcalde hispalense, Juan Ignacio Zoido, que eran compañeros y dicen que algún expediente en común tuvieron».
La instructora no había pedido el amparo al órgano de gobierno de los jueces, pero aún así éste intervino voluntariamente. Lo hizo a través de la Comisión Permanente que advirtió de que «no resultan de recibo las referencias que invaden la esfera personal mediante descalificaciones –veladas o explícitas– que atentan contra el respeto que merece la dignidad personal constitucionalmente garantizada». El CGPJ asegura también que «el rechazo a tales discrepancias es mayor en cuanto contienen insinuaciones claramente vejatorias por las condición de mujer de la magistrada aludida».

Este respaldo no motivó un cambio de estrategia dentro del PSOE. El vicepresidente del Gobierno y número uno por Cádiz, Manuel Chaves, siguió con sus acusaciones de falta de independencia y aseguró que «la señora jueza está en plena campaña electoral, ya que está tomando sus actuaciones en plena campaña electoral, y lo digo sin ninguna mala intención».
Más comedido se mostró el presidente José Antonio Griñán, que evitó valorar el comunicado del CGPJ pero señaló que «jamás» se ha pronunciado sobre Alaya y acusó a PP de realizar «un juicio paralelo, declarando inocencias y culpabilidades, y haciendo una instrucción, utilizando políticamente los autos de la juez».

Antes, el presidente del PP-A, Javier Arenas, acusó a ambos de «orquestar una campaña» contra la magistrada. «Griñán, Chaves y yo sabemos quién está en el vértice de la pirámide», apuntó el líder popular en referencia al último auto de la juez en el que señala que la instrucción aún tiene que avanzar y «escalar» en la pirámide de responsabilidades.
El PSOE ya trató de apartar a la titular del juzgado de Instrucción 6 de Sevilla del «caso Mercasevilla», origen de la «trama de los ERE». Los socialistas le pidieron que se abstuviera del caso para «no someter a la justicia, bajo sospecha, a un tema tan mediático». Era su peculiar forma de sumarse a una petición de recusación de una de las imputadas que luego la Audiencia rechazó en diciembre de 2010.

Además del fraude de los ERE, Alaya también instruye una causa contra el hermano de Alfonso Guerra. Investiga un posible alzamiento de bienes de Juan Guerra por vender un piso que estaba embargado.

 

Guerra, como Chaves y Rubalcaba, prefiere las elecciones conjuntas
sevilla- Guerra tiene tiempo durante la campaña para hacer comentarios «vejatorios» contra la magistrada Alaya y para criticar al líder su partido en Andalucía, José Antonio Griñán. El cabeza de lista por Sevilla admitió ayer que «siempre he sido partidario de unir» las elecciones generales y autonómicas en Andalucía «porque supone un ahorro de energía, de esfuerzo humano y un ahorro económico, pero esta vez están separadas».

En una entrevista en Canal Sur Radio recogida por Europa Press, aseguró que el resultado del 20-N tendrá repercusión en las autonómicas. «Siempre alguna influencia tiene que tener, aunque sea relativa, pero no creo que sea como para decidir una sobre otra».

Según su teoría, «si ganas o pierdes algo influye en el estado de ánimo de los partidos», aunque la clave estará «en la gran batalla que dan los medios de comunicación al servicio del PP. Eso es una cosa mucho más intensa», subrayó. También recalcó que no pensaba presentarse en estos comicios, pero que en el PSOE «me han pedido seguir».