Ministerio de Justicia
Nueva mayoría por José Antonio Ballestero Pascual
El CGPJ, pese a todos aquellos que venían pregonando su incapacidad para el autogobierno, acaba de elegir nuevo presidente. Es un juez de larga trayectoria cuyos méritos profesionales nadie puede poner en duda al venir desempeñando hasta el día de hoy la Presidencia de la Sala de lo Social del Tribunal Supremo. Le damos la bienvenida porque su nombramiento supone la superación de la etapa de interinidad abierta por los últimos episodios. Esta normalidad institucional –que la composición de un órgano colegiado obedezca al mandato legal– no impide señalar la delicada situación por la que atraviesa el Consejo, de modo que hemos de ser exigentes con el nuevo presidente y con la mayoría que lo ha elegido. Pese a la limitación temporal de su mandato, el Sr. Moliner, si quiere fortalecer al Consejo, ha de presentar a la sociedad un programa acorde con las altas funciones constitucionales que el órgano tiene encomendadas. Ha de aunar en torno a este programa no sólo a la mayoría que lo ha votado sino al mayor número posible de vocales, y esto sólo lo va a conseguir si pone en práctica de manera decidida unas políticas tendentes a asegurar la independencia de los jueces frente a todos, al servicio de la igualdad de todos ante la Ley. Significa esto que la nueva mayoría del Consejo se ha de pronunciar acerca de todas las reformas de gran calado que el Ministerio de Justicia quiere poner en práctica de forma inminente. Ésta será su piedra de toque: el nuevo sistema de elección de los vocales judiciales; las competencias del Consejo; la dedicación de sus miembros; la función del presidente, etc. En definitiva, si aboga por unas reformas que profundicen en la despolitización de la Justicia como base de su necesaria reorganización o si, por acción u omisión, se coloca en la posición involucionista de quienes ven en el CGPJ un «árbol caído». El tiempo nos lo dirá, pero ha de recordar la nueva mayoría que todas las asociaciones de jueces y fiscales por abrumadora e inusitada unanimidad han exigido la paralización inmediata de cualquier reforma de la Ley Orgánica del Poder Judicial y del Estatuto Fiscal sin la participación de jueces y fiscales.
José Antonio Ballestero Pascual
Magistrado de la Sala Civil y Penal del Tribunal Superior de Justicia de Galicia
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