España
Soria recuerda a los mineros que el sector del carbón recibe más fondos que el turismo
Ayer comenzó la marcha de los mineros hacia la capital y ayer el Gobierno apeló a la difícil situación económica, y a los obligados ajustes presupuestarios para cumplir con el objetivo de déficit, para insistir en que no tiene margen para modificar los recortes en las ayudas al carbón, que siguen, en cualquier caso, las instrucciones de la Unión Europea.
Los Presupuestos Generales del Estado para 2012 incluyen más de 600 millones de euros en ayudas para el carbón, afectando a unos 4.000 empleos. Y la partida en apoyo al turismo, sector que representa el 10% del PIB y tiene efectos sobre más de dos millones y medio de personas, se queda en poco más de 400 millones. El ministro de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria, comparó estas cifras antes de subrayar que no tiene «margen de maniobra» en las decisiones ya adoptadas en la materia.
Ése es el mensaje que el jueves transmitió a los parlamentarios del PP que se reunieron con él para plantearle la posibilidad de mejorar el capítulo de ayudas a la mina. Aunque no haya alternativa para cambiar la situación actual, el ministro volvió a emplazar a sindicatos y empresarios del carbón a la negociación para sacar adelante el Plan del Carbón 2013-2018.
«Si no hay nuevo plan, en el siguiente año, aunque hubiera partida presupuestaria, que la va a haber, no podríamos hacer las transferencias para formación, para planes de empresa y para una reestructuración», defendió. Por tanto, la política de restricciones presupuestarias se mantiene, pero el Gobierno ofrece diálogo, «escuchar y llegar a acuerdos» con los mineros que han emprendido su marcha de protesta desde las cuencas mineras hacia Madrid. «A todos los ministros nos gustaría disponer de más recursos pero el objetivo de control de déficil está ahí y es insalvable», concluyó Soria.
Comienza la «marcha negra»
Los mineros comenzaron un largo camino a Madrid, donde se manifestarán frente al Ministerio de Industria contra los recortes en el sector del carbón. Los participantes en las diversas marchas, ataviados con camisetas reivindicativas para que no se cierren esas cuencas, emprendieron sus rutas confiando en que el conflicto se arregle tan pronto como sea posible.
Eso sí, con la esperanza de que se produzca un acuerdo antes del 11 de julio, día en el que está prevista la llegada a la capital.
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