CiU reconsidera la velocidad variable y la amplía hasta Martorell

Barcelona- El sistema de velocidad variable en la AP-7, AP-2 y B-23, en el tramo entre Martorell y la avenida Diagonal de Barcelona, pasando por Molins de Rei, entrará en vigor mañana, mientras que entre este año y 2014 se prevé que se extienda a otros tres tramos viarios. El conseller del Interior, Felip Puig, y el director del Servei Català del Trànsit (SCT), Joan Aregio, anunció la entrada en funcionamiento del tercer tramo de velocidad variable en los accesos a Barcelona, que se suma a los de la C-31 y C-32. Tras unos días de pruebas, finalmente, se pone en marcha este sistema en un tramo de casi 20 kilómetros que va de la salida de Barcelona por la Diagonal hasta Martorell y que ha supuesto una inversión total de 2,9 millones de euros. Puig hizo una encendida defensa de este modelo, fuente de críticas cuando lo aplicó el tripartito y que ahora ha calificado de «muy contrastado en Europa», porque permite un «ahorro considerable» en combustible y tiempo, además de reducir los accidentes. El conseller aclaró que para aplicar el sistema no se han instalado más radares de los que había hasta ahora y explicó que las velocidades podrán variar según el tramo. Oscilará entre el valor máximo de velocidad en cada tramo, 120 km/h, 100 km/h y 80 km/h, y la mitad de cada valor, 60 km/h, 50 km/h, y 40 km/h. Según el calendario de ampliación de la velocidad variable del Govern, supeditado a las disponibilidades presupuestarias, se prevé aplicar este año el sistema en la B-20 norte, seis kilómetros entre Santa Coloma y Tiana.