Barcelona
El PSC promete no ser hostil en el inicio del gobierno de CiU
El líder de CiU y fuuro presidente de la Generalitat, Artur Mas, abrió ayer con el PSC la ronda de contactos que va a mantener con todos los partidos antes del debate de investidura. Mas se reunió durante una hora en el Parlament con Joaquim Nadal, que será presidente del grupo parlamentario de los socialistas hasta el próximo otoño (momento en que el PSC designará a su nueva dirección)
Nadal explicó brevemente los contenidos de una charla que calificó de «franca y cordial». El veterano dirigente del PSC tendió la mano a CiU para colaborar en los grandes asuntos de la agenda catalana (crisis, sobre todo) y prometió que no será beligerante, al menos durante los primeros pasos de Mas.
«Hay temas de país en los que efectivamente podemos llegar a trabajar de manera conjunta», aseguró Nadal. Y añadió: «Haremos una oposición exigente, crítica, dura y rigurosa, pero al mismo tiempo constructiva». Los socialistas, conscientes del amplio respaldo que ha recibido CiU en las últimas elecciones, no se ven con coraje de acosar a los nacionalistas hasta que no hayan recompuesto su partido.
Hoy seguirán los contactos de CiU. Al mediodía con el PP y a primera hora de la tarde con ICV. Los convergentes confían en ver investido a Mas como presidente de la Generalitat antes de Navidad. Para eso, el Pleno de constitución de la Cámara de la IX Legislatura debería celebrarse dentro de dos semanas. CiU espera que su candidata, Núria de Gispert, se convierta en la próxima presidenta del Parlament.
Los partidos aún no han definido su postura en el debate de investidura, aunque es previsible que el PSC e ICV voten en contra de la presidencia de Mas. ERC y PP están abiertos a la abstención, pero primero deben negociar con CiU.
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