Más soluciones menos palabras

BARCELONA- Queda menos de un mes para las elecciones catalanas y poco más de una semana para que la campaña electoral empiece de manera oficial. Por este motivo, los partidos catalanes tienen ya los motores encendidos de cara a los comicios y, poco a poco, empiezan a dar a conocer los principales detalles de su campaña. Ayer le tocó el turno al PP, cuya presidenta, Alicia Sánchez-Camacho, anunció que los populares intentarán presentarse como un partido sensible con las necesidades de los ciudadanos y alejado de polémicas que no aportan soluciones para el día a día de la gente. «No haremos una política de salón ni de cartón piedra, haremos una campaña de proximidad ofreciendo soluciones a problemas reales», afirmó la líder del PP.
Por este motivo, el cartel que protagonizará la precampaña popular reza: «Soluciones para la crisis». Vallas, banderolas y venecianas se instalarán por media Cataluña con un lema, que no ha sido escogido al azar. No en vano, el paro y la crisis económica se sitúan como las principales preocupaciones de los catalanes. Tal y como apuntó la candidata popular a la Generalitat, «nuestras prioridades son las de los catalanes: la creación de ocupación, la economía familiar, la inmigración ilegal, la educación, la delincuencia o la sanidad».
Durante toda la campaña, los populares tratarán de «transmitir confianza y esperanza» ya que, según Sánchez-Camacho, «tenemos las recetas para salir de la crisis». A modo de respuesta a los ataques que ha recibido la formación en los últimos días a raíz de sus propuestas en materia de inmigración, la presidenta del PP avanzó que «no rehuiremos ningún tema, queremos hablar con claridad aunque seamos políticamente incorrectos».
El PP trabaja con los ojos puestos en convertirse en un partido clave a la hora de configurar el próximo gobierno de la Generalitat. «Tenemos la aspiración de ser decisivos para que haya un cambio real y útil en el gobierno, ya que el camino hacia la independencia emprendido por CiU es sinónimo de inestabilidad y retraso en la salida de la crisis económica», explicó Sánchez-Camacho.