Mirotic en el escaparate

Cuando el Real Madrid ganó su última Copa del Rey, Nikola Mirotic (11-2-1991, Pogdorica –Montenegro–) apenas podía coger un balón de baloncesto. Aquel título fue en La Coruña ante el Marbella Joventut (74-71) y el equipo lo lideraba Arvydas Sabonis. Dieciocho años después, el Madrid aspira a ganar un torneo que desde 1993 sólo le da disgustos. El último fue el año pasado ante el Barcelona en Bilbao.

Aquella final, Mirotic la vio en Palencia por televisión. Sin ir tan lejos, hace apenas mes y medio, la nueva estrella de la plantilla de Ettore Messina era un jugador al que sólo se veía en las ruedas de calentamiento. De los 19 minutos totales en las nueve primeras jornadas de la ACB ha pasado a decidir partidos en Siena, Granada, Sevilla y Manresa. Su eclosión le ha costado la ficha a Garbajosa; le ha incluido en las agendas de los ojeadores de la NBA que acudirán al Palacio para ver la Copa y le puede convertir el próximo verano en internacional con la Selección de Sergio Scariolo.

Mirotic reclamó la atención de todos en su etapa junior. Su presentación en sociedad se celebró en el Torneo de Hospitalet , el más prestigioso de España. Anotó 35 puntos sin fallo y alcanzó una valoración de 84 cuando los mejores cada jornada en la ACB raramente superan los 30. Para no frenar su progresión, el Real Madrid decidió que lo mejor era que tuviera minutos en la Adecco Oro, en la Segunda División. Recaló en Palencia y, cuando regresó al equipo de Messina, el técnico italiano afirmó: «Mandamos un niño y nos han devuelto un hombre». Su siguiente salto fue el Europeo de Croacia con la Selección sub'20. «Nikola no sólo es un gran jugador. Es un buen compañero, trabajador, comprometido, voluntarioso, capaz de escuchar y de querer aprender siempre», afirma Juan Antonio Orenga, su seleccionador el pasado verano.

Su compromiso con «La Roja» fue y es total. Tres días antes de debutar en Croacia sufrió una lesión importante en un tobillo y fue casi descartado. Pero su deseo de ayudar era tan grande que no quiso abandonar el grupo, a pesar de que se perdiera los cinco primeros partidos. Llegó para la fase decisiva y fue el salto de calidad que necesitaba el equipo para aspirar a las medallas y terminar conquistando el bronce. «En su puesto y a su edad es el mejor jugador de Europa», se asegura desde la Federación. Esa valoración se corresponde con el seguimiento que realizan Sergio Scariolo y el Gabinete Técnico de la Federación sobre su temporada. Mirotic puede ser una de las novedades de la Selección en el próximo Eurobasket. Si el pasaporte de Serge Ibaka (Oklahoma City Thunder) no llegase a tiempo, el ala-pívot de origen montenegrino tendría un puesto prácticamente garantizado en la lista de 14 para Lituania. Sólo se puede llevar a un «extranjero». El primero de la lista es el pívot congoleño siempre y cuando tenga todos los papeles en regla. Si no, será la hora de Mirotic.

Antes llega la Copa del Rey y el primer rival será el Gran Canaria 2014, un equipo que en la primera vuelta de la ACB ya pudo en su cancha con los de Messina. Los canarios jamás han superado los cuartos y todo apunta a una reedición de la final de 2010 –incluida la presencia de los Reyes en el partido decisivo–, aunque el técnico italiano no quiere oír hablar de ello.