«Si esto no se apaña: caña caña caña»

Los piquetes informativos han conseguido impedir de momento la salida de los autobuses de la Empresa Municipal de Transportes (EMT) de las cocheras de Fuencarral, aunque los vehículos empiezan a salir de otras instalaciones en medio de fuertes presiones de lo piquetes.

Según fuentes del Consorcio Regional de Transportes, a pesar de los piquetes, que se han trasladado a las cocheras de la EMT desde Mercamadrid, los autobuses están empezando a abandonar las instalaciones de La Elipa, Carabanchel y Entrevías.

La situación es diferente en Fuencarral donde, según las fuentes consultadas, la falta de protección policial impide la salida de los vehículos. En estas cocheras unos 300 piquetes se han concentrado desde las 4 de la mañana en cada puerta y han protagonizado incidentes tanto con conductores a los que increpaban a su entrada al trabajo como con los policías que intentaban escoltar a los vehículos. Sólo un autobús logró salir escoltado a huevazos y bajo insultos y amenzas. «Si ésto no se apaña, caña, caña, caña», ha sido el lema coreado por los sindicalistas que sentados en el suelo impedían la circulación de los vehículos.

A las 5:00 de las mañana y entre gritos de «que le den por culo al aeropuerto» los piquetes han logrado imopedir la salida del 204 hacía Madrid-Barajas.

Tres detenidos en La Elipa y Chamartín
A pesar de las violencia con la que se han empleado los piquetes «convencitivos» sólo ha habido un detenido en La Elipa y dos en Chamartin.

Las dos detenciones de Chamartín se produjeron cuando uno de los autobuses sufrió, en torno a las 6.25 horas, la rotura de una luna lateral al recibir una pedrada a su salida de las cocheras. Los antidisturbios desplegados realizaron una carga en la zona de la que procedía la agresión, en la que se encontraban los representantes de la CNT. 

Este incidente fue el de mayor violencia durante la primera hora punta de la mañana, en la que los piquetes, pertenecientes en su mayoría a CC.OO. y UGT, abuchearon a los empleados que acudían a su puesto de trabajo y lanzaron huevos.

Además, los piquetes corearon lemas contra los trabajadores que acudían a su puesto, como "Los esquiroles no son obreros", y contra la antidisturbios, como "Ser policía, vergüenza que daría". No hubo agresiones físicas, pero se produjo algún encontronazo verbal entre huelguistas y trabajadores. Al menos un autobús de trabajadores llegó escoltado.

De los cuatro autobuses que intentaron salir entre las 6 y las 7 horas, tres no lo hicieron, uno de ellos por recibir una pedrada, otro por haber sufrido pintadas y un tercero, porque el eurodiputado de IU Willy Meyer, que participó en el piquete informativo a las afueras de las cocheras, persuadió al conductor para que no lo hiciera.

Fuentes sindicales confirmaron que han logrado evitar que los autobuses salieran de algunas de las cocheras.En Madrid, el Gobierno regional ha fijado por decreto los servicios mínimos en el transporte al no llegar a un acuerdo con los sindicatos.

En el caso de los autobuses de la EMT, los servicios mínimos se han establecido en el 50 por ciento en las horas punta y en el 20 por ciento en el resto.

Desde UGT indican que sólo entre el 15 y el 20% de los autobuses urbanos e interurbanos funcionan en Madrid y hay zonas como Fuenlabrada o Leganés donde no circula ningún vehículo.

En torno a las siete de la mañana el tráfico era más intenso de lo habitual en la ciudad.

Normalidad en el Metro
El metro de Madrid ha iniciado la jornada de huelga general con el 75% de los servicios habituales funcionando con normalidad, ya que el 99% de los conductores en un día ordinario se ha presentado a sus puestos de trabajo, según la Delegación del Gobierno en la Comunidad de Madrid.

No obstante los piquetes han intentado también impedir que los trabajadores del suburbano trabajasen con normalidad. Esta madrugada los autobuses que transportaban a trabajadores de Metro de Madrid han sido apedreados por los sindicalistas.

Testigos presenciales han indicado que algunos de estos incidentes han tenido lugar hacia las 5.00 horas en las cercanías de la estación de Atocha, donde autobuses privados recogen

De acuerdo con su testimonio, los ataques de los piquetes han causando la rotura de varias lunas en dichos autobuses pese a que algunos llevaban colgados el cartel de servicios mínimos. 

Pese a estos incidentes, el Metro de Madrid funciona por encima de los servicios mínimos decretados por la Comunidad de Madrid.

De acuerdo con su testimonio, los ataques de los piquetes han causando la rotura de varias lunas en dichos autobuses pese a que algunos llevaban colgados el cartel de servicios mínimos. 

Pese a estos incidentes, el Metro de Madrid funciona por encima de los servicios mínimos decretados por la Comunidad de Madrid.