Economía
Camps pedirá un Pacto de Estado que garantice la unidad de mercado
Era la presentación del programa económico del PP en la Comunitat Valenciana, y se notó. La presencia del presidente y el vicepresidente de Bankia, Rodrigo Rato y José Luis Olivas, así como del presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán, daban una idea de la importancia y trascendencia del momento.
Y Camps no defraudó. El candidato a repetir en la presidencia de la Generalitat valenciana dio lo mejor de sí mismo. En clave nacional anunció que si es reelegido presidente, el 23 de mayo pedirá un «gran Pacto de Estado» que garantice la unidad de mercado, que incremente la seguridad jurídica en España y que elimine las barreras a las inversiones y a las actividades empresariales.
Explicó que propondrá al resto de comunidades autónomas la aplicación de cinco grandes principios: lealtad, para hacer más grande España, cooperación, para fortalecer el país aunándose en proyectos comunes como el Corredor Mediterráneo, coordinación, mediante la homogeneización de las legislaciones que actualmente suponen una barrera a la unidad de mercado, solidaridad y austeridad, es decir, hacer lo necesario con los menores recursos posibles.
Qué hacer por España
Parafraseando a Kennedy, el presidente del Consell explicó que en lugar de preguntar qué puede hacer España por las comunidades autónomas, hay que preguntar qué pueden hacer las comunidades autónomas por España. Además, indicó que el país tiene que volver a crecer como lo hacía antes. «España no puede ser el país de los cinco millones de personas que quieren y no pueden trabajar, ni del millón trescientas familias con todos sus miembros en paro».
Recordó que los grandes países europeos tienen en común que desde la Segunda Guerra Mundial han sido gobernados mayoritariamente por partidos de centro derecha, lo contrario que ha sucedido en España. «Sabemos que el PSOE representa la improvisación y el paro, y el Partido Popular, la eficiencia y el empleo».Por ello, reclamó que es momento de que se produzca un cambio de rumbo en la política española. «Es momento de reformar los que no funciona y mejorar lo que funciona, para convertirnos en una nación más fuerte».
Con respecto al paro, señaló que es el gran problema de España, ya que si los cinco millones de desempleados estuvieran trabajando, generarían unos ingresos anuales de 50.000 millones de euros, y además el Estado ahorraría 30.000 millones en prestaciones por desempleo. De esos 80.000 millones de euros, el 57 por ciento, es decir, 28.500 millones, se transferirían a las comunidades autónomas, de forma que éstas no se tendrían que haber endeudado en los últimos años. Camps llegó así a la conclusión de que se cumple el axioma de que más empleo es menos deuda, por lo que instó a luchar contra el paro.
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