Salamanca

Miguel García: «El fútbol no lo es todo en esta vida»

El jugador del Salamanca, Miguel García, ha asegurado hoy que el "fútbol no lo es todo"durante su primera rueda de prensa después de sufrir un infarto durante el partido Salamanca-Betis, lo que le ha obligado a abandonar el fútbol profesional.

El jugador ha asegurado que ahora trata de "asimilar"su nueva situación, pero que si "algo"le ha quedado en su forma de vivir, después de estar 25 segundos muerto, según revelaron los médicos que le atendieron, es que el "fútbol es secundario".

Miguel García, nacido hace 31 años en Albacete, ha comparecido esta mañana en un hotel de Salamanca para "agradecer a todos"las atenciones que ha recibido.

Ha respondido a todas las preguntas que le han realizado los medios de comunicación, en una rueda de prensa masiva con televisiones en directo, una importancia que para él es normal, ya que es el "único que ha sobrevivido a este palo tan duro".

El centrocampista del Salamanca, a cuyo equipo llegó a principios de temporada tras jugar en la Unión Deportiva Las Palmas, el Cádiz, Castellón, Ponferradina, el filial del Zaragoza y el Albacete, ha relatado lo que vivió el partido del 24 de octubre, en horario matutino.

"Durante el partido sentí presión en mi cuerpo, aunque lo achaqué a una camiseta térmica que llevaba", ha indicado, por lo que en el descanso se la quitó y sintió "alivio".

Apenas se acuerda de lo ocurrido esa mañana antes del desmayo, aunque cuando se reanimó y abrió los ojos se dio cuenta "de la gravedad de lo que había ocurrido".

Ahora su vida le ha cambiado y tendrá que dejar el fútbol profesional, aunque desea seguir vinculado a él, "porque es lo único"que sabe hacer.

Miguel García tampoco encuentra motivos a lo que le ha ocurrido, ya que cuando jugaba en el Cádiz entre 2006 y 2008, tras la muerte del jugador del Sevilla Antonio Puerta, la Junta de Andalucía ofreció exámenes exhaustivos del corazón, que a él no le detectaron ninguna anomalía física, como tampoco se la encontraron al fichar por el Salamanca.

Pero el jugador considera que el origen del incremento de enfermedades del corazón en jugadores profesionales parte de que el fútbol "es cada vez más físico", por lo que hace que "el corazón no aguante esos esfuerzos".

Miguel García se fue con semblante sonriente, entero, pero con cierta emoción, ya que era el momento de los agradecimientos, pero también de la despedida.