Dos años de la victoria del PP

Especialistas para cubrir huecos por Sergio ALONSO

Especialistas para cubrir huecos, por Sergio ALONSO
Especialistas para cubrir huecos, por Sergio ALONSOlarazon

Trinidad Jiménez, el rostro exitoso del Gobierno de Zapatero en los informativos, tiene un oscuro lunar en el Ministerio que dirige: los recursos humanos. De la mano de Alberto Infante, Alfonso Moreno y Verónica Casado, su departamento está a punto de consumar una de las reformas más inexplicables que se recuerdan en la Sanidad española: la que afecta a la formación de los médicos. El asunto es complejo, pero puede resumirse en la máxima de que el Ministerio pretende poblar los hospitales de «especialistas para todo» o «especialistas cubre huecos», capaces casi de servir para un roto y para un descosido. La idea es buena para los directores de Recursos Humanos, angustiados por la falta de personal, pero la duda que surge es la de si no se resentirá la calidad de la asistencia. Bajo el paraguas de la reforma formativa, Sanidad pretende agrupar las especialidades en troncos comunes, excluyendo de los mismos a ocho de ellas: Anatomía Patológica, Oftalmología, Pediatría, Psiquiatría, Ginecología, Otorrinolaringología, Dermatología, y Medicina Preventiva y Salud Pública. Algunas, por cierto, se salvan de la quema más para acallar las iras de las sociedades científicas, que por una necesidad práctica. El hecho sustancial es que a la hora de especializarse, numerosos médicos cursarán dos años de formación común. Al término de este plazo, dedicarán otros dos o tres años a completar su especialidad específica. Esto permitirá, por ejemplo, que un geriatra pueda convertirse en cardiólogo con sólo dos o tres años extra de formación. ¿Tendrá la capacitación necesaria para ejercer la cardiología que si hubiera dedicado cinco años íntegros de su residencia a dicha especialidad?