Moscú
El Parlamento turco da luz verde para atacar a Siria
Erdogan advierte a Asad de que no tolerará más actos hostiles en su territorio
Ankara tomó ayer acciones decisivas contra Damasco en respuesta al ataque del Ejército sirio contra su territorio, que acabó con la vida de cinco personas. Con 320 votos a favor y 129 en contra, el Parlamento aprobó ayer una moción que permitirá el envío de tropas a suelo sirio, según reza la Constitución turca cuando se trata de una agresión exterior contra la seguridad nacional. La medida, presentada por el Gobierno, no supone automáticamente una declaración de guerra, ya que queda a la discreción del Ejecutivo decidir cuándo y cómo realizar esta intervención. El plazo de la moción parlamentaria expira dentro de un año, por lo que sin necesidad de otra autorización gubernamental las fuerzas turcas podrían intervenir en Siria si el Gobierno lo considera necesario. Se trata de una medida que autoriza el envío de tropas al exterior, similar a la adaptada en 2007 para combatir en suelo iraquí a los rebeldes kurdos del Partido de los Trabajadores de Kurdistán, y que se renueva cada año.
Esta dura advertencia es para recordarle, una vez más, al régimen de Bachar al Asad que Turquía no tolerará ningún acto hostil en su territorio. Ankara, a pesar de apoyar abiertamente a los rebeldes sirios, no contempla por el momento una intervención unilateral en Siria. No obstante, Turquía quiere dar una imagen de firmeza y de mantener el control en su frontera, por lo que ha atacado objetivos sirios. «En el marco del derecho internacional y las reglas turcas de entrada al combate, no podemos dejar sin respuesta esta provocación del régimen sirio», advirtió un comunicado del primer ministro turco. Ankara dejó claro ayer que cualquier acción militar contra Siria será coordinada con la OTAN, ante la alarma internacional que provocó la moción parlamentaria que en un principio se interpretó como una declaración de guerra. «Nuestras Fuerzas Armadas han bombardeado objetivos en Siria en respuesta al abyecto ataque y tras determinar mediante el radar desde donde fueron disparados los obuses que cayeron», precisó el Gobierno turco.
La respuesta de Damasco, orquestada por Moscú, fue pedir sinceras disculpas por la muerte de civiles turcos por parte de las tropas sirias. «En caso de incidentes fronterizos que ocurren entre dos países vecinos, los Estados deben actuar de forma sabia, racional y responsable, ya que existen condiciones especiales en las fronteras entre Siria y Turquía, dada la presencia de grupos terroristas indisciplinados desplegados a lo largo de las fronteras, que tienen diferentes agendas e identidades. Estos grupos constituyen una amenaza a la seguridad de Siria y la región», declaró el ministro de Información sirio, Umran Al Zuabi, según la agencia Sana. Una escalada de la violencia en la frágil frontera turco-siria podría llevar a una regionalización del conflicto, algo que la comunidad internacional intenta evitar a toda costa. El hecho de que el régimen sirio haya reconocido su error ha suavizado, en cierta manera, la posición de Turquía. Así lo expresó el viceprimer ministro turco, Besir Atalay: «La parte siria ha admitido lo que ha hecho y se han disculpado».
Los rebeldes sirios no tardaron en apoyar a Ankara ante un potencial ataque contra bases del Ejército sirio. «Esperamos que cualquier intervención sea coordinada con nosotros y creo que así lo harán», afirmó desde Turquía el «número dos» del Ejército Libre de Siria (ELS), Malek Kurdi, quien destacó que una eventual acción debería producirse con el aval de un acuerdo internacional.
El precedente
En plena escalada de tensión, unos documentos confidenciales sirios que sacó a la luz Al Arabiya podrían avivar la llama de la guerra, pues involucran directamente a Asad en el asesinato de dos pilotos turcos. Los hechos se remontan al 22 de junio, cuando fue derribado un caza turco por las fuerzas sirias tras violar, supuestamente, su espacio aéreo. Los papeles revelan que los dos oficiales turcos fueron encontrados con vida y, luego, ejecutados y devueltos al avión para que pareciera un accidente. Los documentos implicarían a Rusia en la muerte: «Los dos pilotos turcos fueron capturados después de que su caza fuera derribado en coordinación con la base rusa de Tartus».
✕
Accede a tu cuenta para comentar