París
Unos Goya poco rentables
Sólo el 10% de las películas españolas cubre gastos. El cine español entregará sus premios en un año en el que ni siquiera dos de las favoritas, «La voz dormida» y «Blackthorn», recaudan lo que invirtieron sus productores
El domingo las sonrisas se deslizarán sobre la alfombra roja de los Goya, pero la industria no pasa por un gran momento a pesar de que los datos de taquilla salvaron el balance al situar la cuota por encima del 15%, según datos de Rentrak, la empresa auditora del sector, aunque el balance oficial del Ministerio de Cultura aún no se ha hecho público. Sin embargo, esta cifra parece un espejismo, pues en buena parte se debe a los buenos resultados de «Torrente 4». El peso de la película de Santiago Segura supone cerca del 20% de la taquilla española, que alcanzó una recaudación total de 95,7 millones, lo que supone un 15% de la recaudación total de las salas en España. Dicha cuota de mercado de nuestro cine habría sido mucho menor sin el estreno de la nueva entrega del policía patrio más corrupto, concretamente, habría bajado a niveles similares a los del año anterior, que tampoco fue de los mejores. Aún el resultado está muy lejos de la aspiración de los productores, que sueñan con un 25% de cuota de mercado.
Banderas, Hayek y Almodóvar
No sabemos si Eva Hache se atreverá a ironizar sobre este aspecto. La humorista ha sido elegida este año para tratar de mantener el nivel que dejó en las dos últimas ocasiones Buenafuente. Se espera la presencia, entre otros, de Antonio Banderas, Salma Hayek y la vuelta de Pedro Almodóvar como candidato, tras su aparición sorpresa en la ceremonia de hace dos años. La gala se emitirá a través de TVE el domingo a las 22 horas desde el Palacio de Congresos y Exposiciones de Madrid, después de haber descartado organizarla en el Palacio de los Deportes, pues la Academia de Cine consideró que era más prudente optar por la austeridad en estos tiempos. Razones no les faltan, y no sólo por la situación que vive el país. Más allá de porcentajes generales, son excepciones los largometrajes españoles que ganan dinero en taquilla; la abrumadora mayoría ni siquiera logra amortizar los costes en esta primera ventana, por eso resulta fundamental tener el «sí» de una televisión, ya sea pública o privada, para lograr empezar un rodaje. El ejercicio pasado, concretamente, únicamente 10 títulos superaron en recaudación los tres millones de euros, de nuevo según datos de Rentrak, el presupuesto medio de una producción en nuestro país. Además de «Torrente 4», flanquearon esa barrera «Midnight in Paris», la película de Woody Allen, con producción de Mediapro, «Fuga de cerebros 2», «La piel que habito», «También la lluvia», «No habrá paz para los malvados», «Primos», «Mientras duermes», «Águila roja, la película» e «Intruders». Algunas de las más nominadas, como «La voz dormida», obtuvieron algo más de dos millones de recaudación, es decir, tres menos que el presupuesto con el que contó. La situación es aún peor para «Blackthorn», el western de Mateo Gil que con Eduardo Noriega y Sam Shepard despertó el interés de unos 55.000 espectadores, es decir, no alcanzó el medio millón, cuando su coste fue similar al del filme anterior. Los filmes con más aspiraciones a estatuilla han sido reestrenados para darles una segunda oportunidad comercial.
Las últimas de la clase
Por debajo del medio millón de caja nos encontramos otras apuestas comerciales, como «23-F: la película» y el filme de género «La herencia Valdemar II: la sombra prohibida». Mientras el cine español se mira en el espejismo de «Torrente 4», las cifras globales de asistencia a salas continúan la pendiente de años anteriores. Mientras que en 2010 la cifra de entradas vendidas rondaba los cien millones, el ejercicio anterior apenas superó los 95, lo que supone un descenso del 11%, la taquilla, estancándose en los 655 millones de euros. En la mayor parte de Europa este descenso fue más moderado, incluso en algunos países como en Francia, se produjeron cifras récord, en total 210 millones de entradas, un 4,2 % más que en 2010, lo que supone el mejor número desde 1966. La industria aún sigue esperando las medidas antipiratería redactadas por el anterior Gobierno y que han sido relanzadas por el actual tras la aprobación de la orden ministerial que permitirá bloquear contenidos de webs de enlaces que se lucren con el material protegido por derechos de autor.
Además del hecho de que, en general, el cine español nunca ha tenido una gran acogida en nuestro país, el nivel de «piratería» de cine en la red tampoco ha ayudado a que los títulos de mayor pujanza entre el público consiguen una mayor recaudación en las salas. La Federación para la protección de la propiedad intelectual (FAP) estima que las pérdidas que sufre la industria cultural española por culpa de las descargas ilegales ascienden a 29 millones de euros al día. Después de la música, el cine es el sector que más mermados ve sus ingresos: la tasa de «piratería» asciende al 73,9 por ciento en este sector según la FAP, mientras que el valor de lo «pirateado» lo estiman en 1.401,6 millones.
En las últimas semanas el Ministerio de Wert y el sector están tratando de llegar a acuerdos para que el ajuste, que en principio iba a ser superior al 50 por ciento, sea lo más reducido posible. Además de que en el ambiente también sobrevuele el recorte a las subvenciones que hará efectivo el Gobierno con la presentación de los nuevos presupuestos previstos para finales de marzo, antes, el Instituto de la Cinematografía y las Artes Audiovisuales (ICAA) hará pública la convocatoria de ayudas a la amortización, es decir, las subvenciones automáticas que dependen de la taquilla. Vista la pobre recaudación del cine español en el pasado año, tampoco parece que estas vayan a llenar las arcas de los productores.
Las cuatro nominadas, ni la mitad de recaudación que «Torrente 4»
El divorcio entre los gustos del público y los de los académicos vuelve, un año más, a ser irreconciliable. La recaudación de los cuatro títulos protagonistas de la gala de este domingo, es decir, los que optan al galardón de mejor película, suman todos juntos la mitad de la taquilla que ha cosechado «Torrente 4», de Santiago Segura. El policía corrupto logró en 2011 una caja cercana a los 22 millones de euros, mientras que las elegidas por los académicos apenas alcanzaron juntas los once. La película de Almodóvar se situó muy lejos de registros como los de «Volver», pues ocupa el puesto 34 de las más taquilleras y ha recaudado algo más de 4,6 millones. Siete puestos por debajo se sitúa una de las sorpresas del año, «No habrá paz para los malvados», de Enrique Urbizu, que vendió cuatro millones en entradas. Peor suerte corrió «La voz dormida», de Benito Zambrano, que sobrepasó con dificultad los dos millones. La menos favorecida por la taquilla, aunque ha vuelto a reestrenarse como el filme de Urbizu, es «Blackthorn», el fantástico «western» de Mateo Gil que se quedó lejos del millón de euros.
El detalle
Danza para amenizar
Cada vez se conocen más datos sobre cómo será la gala de los Goya del próximo domingo: además de las parodias tradicionales de las cuatro películas finalistas, la fiesta de este año, dirigida por Arantxa Écija, tendrá también un número musical con una actuación que firma la coreógrafa española afincada en París Blanca Li, y que será interpretada por famosos intérpretes.
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