La Liga arde por abajo

Sólo hay nueve puntos de diferencia entre el antepenúltimo, primer puesto en el que se desciende, que lo ocupa el Hércules, y el noveno, que es el Mallorca. Cada jornada puede ser decisiva.

Almería-Valencia. Algunos casos son extremos, como el del Almería. Último clasificado y a más de un partido (concretamente, a cuatro puntos) de la salvación, recibe además a un equipo en forma y crecido como el Valencia. Es el que menos margen de maniobra tiene.

Málaga-Mallorca. El ambicioso proyecto del jeque Al Thani puede acabar en desastre. «Debemos conseguir 12 de los 21 puntos que quedan», reconoce Pellegrini, el entrenador, que podrá contar hoy con Baptista para enfrentarse al Mallorca. El conjunto de Laudrup es noveno y con una victoria daría un paso casi definitivo.

Getafe-Sevilla. Míchel no teme por su futuro, pero su presidente, Ángel Torres, sólo asegura la continuidad del técnico «de momento». El Getafe ha pasado de pensar en Europa a preocuparse por el descenso. Sólo siete puntos sumados en toda la segunda vuelta tienen la culpa. El Sevilla no es un rival fácil para remontar.

Tres duelos directos para mañana. Real Sociedad y Sporting, que se enfrentan mañana, pueden tener un final de campeonato tranquilo si logran un par de triunfos. Lo mismo les sucede al Deportivo y al Racing, que se verán las caras en Riazor, y al Levante, que recibe a uno de los equipos que están con la soga al cuello, el Hércules. «Dependemos de nosotros mismos», dice, pese a todo, Trezeguet.

También al límite está Zaragoza, que pretende aprovechar la relajación del Villarreal, ya semifinalista de la Liga Europa. Osasuna, decimoquinto, cierra el círculo con la visita del Athletic Club en un partido con polémica por las declaraciones de Gurpegui, en las que el jugador dijo que Osasuna no cuida su cantera.