Burdeos

ETA encargó a diez células la «kale borroka» en el País Vasco francés

Los integrantes de esta red son «ideológicamente afines a la izquierda abertzale», según un documento intervenido a «Thierry»

Imagen de archivo del presunto etarra Javier López Peña, alias "Thierry", detenido en Burdeos - 21/05/2008
Imagen de archivo del presunto etarra Javier López Peña, alias "Thierry", detenido en Burdeos - 21/05/2008larazon

Una red de diez células, compuesta cada una de ellas por tres personas y coordinadas por un miembro de ETA, ha sido la responsable de los ataques violentos registrados en los últimos años en el País Vasco francés. Así se desprende de un documento intervenido en los ordenadores del "aparato político"de ETA en mayo de 2008, a raíz de la captura de Francisco Javier López Peña, alias "Zulos"y "Thierry".


El documento, cuya existencia fue dada a conocer por la fiscalía en un reciente juicio celebrado en París contra dos ciudadanos franceses condenados por tres ataques, es un informe dirigido a la dirección de ETA con los datos proporcionados por el miembro de la banda que se encargaba de lo que él llama "gestionar una dinámica que ya existía".


El coordinador de los grupos que operan en el País Vasco francés había decidido irse a América Latina y antes de realizar el viaje quería dejar resuelto el nexo entre ETA "y los militantes que trabajan en las ekintzas".


En los últimos años, grupos del entorno radical abertzale han cometido decenas de ataques con artefactos caseros contra empresas, bancos, sedes oficiales y lugares turísticos cubiertos bajo el lema de "Euskal Herria no está en venta"(Euskal Herria ez da salgai). 


En el documento presentado a ETA y al que ha tenido acceso la agencia "Vasco Press"se informa de la existencia de diez células organizadas, cada una de ellas formada por tres personas y con su propio zulo, que actúan de forma autónoma. A pesar de esa actuación autónoma, se indica que los componentes de esas células "han puesto en marcha el instrumento interno para la formación, DVDs, prácticas los fines de semana, pruebas con los diferentes materiales...". 


En el texto utilizado por la fiscalía ante el tribunal de París se describe cómo el miembro de ETA informa que la mayoría de los militantes que forman esa red de grupos "son familiares de la izquierda abertzale, muchos han sido colaboradores de la Organización, por tanto ideológicamente están ligados con la línea de la izquierda abertzale".


Datos concretos
Aporta también algunos datos concretos. Hacía poco tiempo que se había integrado en la red un grupo relacionado con Iparretarrak cuyos miembros eran autores de uno de los ataques perpetrados en la localidad de Urrugne.


Otro de los comandos estaba constituido desde hacía cuatro o cinco años y había realizado atentados contra la Subprefectura de Bayona. "Parece que son los autores de una gran parte de las ekintzas (atentados) realizadas este año", se apostilla. 


Según el escrito, los participantes en los diferentes grupos de la red tenían que ser militantes "legales", no fichados, que hacen vida pública con normalidad. "No se desea clandestinos ya que no lo ve con la realidad de Euskal Herria norte", se precisa. 


Por encima de los grupos contemplaba una estructura formada exclusivamente por tres personas. Una encargada de la coordinación entre las diferentes células, otra encargada de enlazar las actividades de esa red con ETA, así como las actividades relacionadas con la infraestructura, el material, la formación. La tercera tendría la responsabilidad de transmitir a los grupos violentos encuadrados en esa red las directrices y la línea política establecida por la izquierda abertzale.