Elecciones generales

Hechos probados

La Razón
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Es un hecho probado que el pasado día 22 de diciembre la hija de Valcárcel fue insultada y zarandeada a las puertas de su domicilio por parte de un grupo de radicales que participaba en la manifestación de la izquierda murciana. Es también otro hecho probado que momentos antes a este ataque, el secretario general de Presidencia, José Gabriel Ruiz, y el senador Pedro Manuel Hernández fueron gravemente insultados y agredidos en las inmediaciones de la Cámara de Comercio. Es también otro hecho probado que a la mañana siguiente otro senador, Pedro José Pérez, fue empujado por integrantes de piquetes sindicales a la entrada de la Asamblea Regional y que a varios alcaldes les fuera impedida la entrada en el edificio. También está probado, y de todo ello hay abundante documentación gráfica que los día 27, 29, 4 y 12 de enero se volvieron a producir algaradas callejeras ante las puertas del domicilio privado de Valcárcel y que muchas de ellas estuvieron precedidas por concentraciones sindicales y actos reivindicativos en los que participaron los más altos dirigentes del PSRM-PSOE. Es también otro hecho probado que poco antes de las siete de la tarde del sábado 15, dos individuos propinaron una soberana paliza al consejero de Cultura, Pedro Alberto Cruz, que obligó su ingreso hospitalario con graves heridas en ojo, pómulo y mandíbula. Todo esto son hechos probados que nadie puede poner en duda. Todo esto es lo que se ha llamado el «caldo de cultivo» y adquiere también categoría de hecho probado. Nadie se ha inventado las manifestaciones, ni tampoco los insultos, y mucho menos las agresiones y miente quien dice lo contrario. Pero aquí está el juego. Es tan grave lo sucedido que la izquierda no puede aceptar bajo ningún concepto la gravedad de los hechos y su responsabilidad en ellos. También es otro hecho probado que hasta la agresión al consejero no se hiciera nada por evitarla, no se hizo nada para evitar que esto acabara como ha acabado. Ahora, el presunto agresor en libertad con cargos amenaza con recurrir a los tribunales para demandar a quienes le han podido injuriar, lo que nos hace pensar que estamos en un mundo al revés. No vaya a ser que todos los hechos probados que aquí se destacan sean la invención de quien suscribe. Los hechos son los hechos y las opiniones libres.