Navarra

El Supremo ve más fácil tumbar las agrupaciones que las listas de Bildu

Los 16 magistrados que componen la Sala del 61 del Tribunal Supremo han comenzado pasadas las diez de la mañana sus deliberaciones para decidir si admiten o no los recursos presentados por la Fiscalía y la Abogacía del Estado contra las candidaturas de Bildu a las elecciones del 22 de mayo.

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Tras el retraso de 24 horas derivado de la falta de notificación de las demandas de la Fiscalía a algunas listas de Bildu y a las agrupaciones electorales Biscasa, Pialote y Alkarlanien, las dos primeras concurren en el municipio navarro de Navascués y la tercera en Ubide (Vizcaya), los 16 magistrados que integran la Sala del 61 disponen ya de todas las alegaciones de la defensa para resolver si la coalición y las agrupaciones de electores impugnadas estarán en los comicios del día 22.

Y la decisión final no se prevé ni fácil ni que vaya a concitar una unanimidad entre sus miembros, principalmente en lo que refiere a las candidaturas de la coalición integrada por Eusko Alkartasuna, Alternativa e «Independientes». Tanto desde la Fiscalía como desde el propio Gobierno se admite que este caso entraña una dificultad mucho mayor que en los supuestos planteados hasta ahora, el último de ellos, el de Sortu. La circunstancia de que los partidos legales EA y Alternatiba formen parte de la coalición dificulta, según fuentes jurídicas, la anulación de sus listas. «Habrá que afinar mucho», se afirma al respecto. Pese a ello, es probable que listas concretas de Bildu sí queden fuera de las elecciones, aquellas en las que se constate la existencia de un número relevante de miembros vinculados a Batasuna o a formaciones «satélites» del complejo ETA-Batasuna.

Sin embargo, lo que afecta a las agrupaciones electorales impugnadas –16 por la Abogacía del Estado y 18 por la Fiscalía– parece bien distinta. En estos casos no ha habido siquiera el intento de «disimular» la relación de gran parte de esos candidatos con ETA-Batasuna o con agrupaciones o partidos que fueron ilegalizados, de forma especial ANV.

Friamente, da hasta la impresión de que se trata de una especie de «señuelo» para que el Tribunal Supremo adopte una medida que, en el fondo, puede satisfacer a gran parte del espectro político.

Un análisis de esas candidaturas muestra a las claras el «poco interés» que ha tenido Batasuna en fomentar en esos municipios listas con candidatos «no pillados», expresión utilizada por Juan Cruz Aldasoro en una conversación telefónica intervenida por la Policía con otro miembro de la formación ilegalizada. Incluso una de las agrupaciones presenta como candidato a un ex miembro de ETA que fue condenado por asesinato y pertenencia a la banda armada.

Se trata de Joxan Pagola Kortajarena, quien figura en la lista de la Agrupación Electoral de Alkarlanien, que se presenta en el municipio de Ubide (Vizcaya). En 1985 fue condenado por la Audiencia Nacional por haber participado en el asesinato de un empresario hostelero que residía en Hernani, quien, al parecer, se había negado a pagar a la banda el «impuesto revolucionario». En 2003 salió de prisión y cuatro años más tarde concurrió en las listas de ANV, al igual que otro de sus compañeros en esta misma agrupación. Otros dos candidatos también están directamente vinculados a formaciones ilegalizadas. En total, de los cinco miembros de esta agrupación hay cuatro que están más que significados por su vinculación con ETA-Batasuna.

En la Agrupación Electoral de Laraun Bat, que concurre en Larraun (Navarra), uno de los candidatos, Félix Arregui Razquin, fue detenido en 1997 por un delito de colaboración con ETA. Este dato es aportado por la Fiscalía en su demanda contra la citada agrupación. En esta candidatura, de los 12 integrantes, otros seis fueron candidatos por formaciones ilegalizadas, como ANV o HB.

Candidato «con experiencia»
También es destacable lo que ocurre en las agrupaciones Pilote Biscasa , quienes concurren en el municipio navarro de Navascués, así como la que se presenta en Etxarri-Aranaz, también la Comunidad Foral. Las tres listas cuentan con un único candidato. En la primera de ellas, el aspirante a concejal, Antonio Iriarte de Vicente, fue candidato por ANV en 2007 y años atrás hizo lo propio en las listas de Euskal Herritarrok.

La situación se repite en la Agrupación de Biscasa. Un candidato único, José Manuel Antón Lázaro que también lo fue en 2007 por ANV y con anterioridad por Euskal Herritarrok. Y en el caso de Etxarri-Aranaz, igual. Su candidato, José Manuel Garmendia Lacunza, también lo fue por Euskal Herritarrok en 1999. La Agrupación Electoral Izquierda Falcesina, que se presenta en el municipio navarro de Falces, tampoco esconde lo más mínimo sus cartas. De sus 13 candidatos, nueve ya figuraron en las listas de Euskal Herritarrok o ANV.

En el fondo, todo parece conducir que, en estos casos, se trata de una estrategia.


Bildu agota el plazo y presenta más alegaciones
La coalición Bildu presentó al filo de las 00:00 horas de la noche un escrito ante la sala del 61 del Tribunal Supremo ampliando sus alegaciones contra los recursos en los que la Fiscalía y la Abogacía del Estado solicitan la anulación de sus candidaturas para los comicios del próximo 22-M. Bildu niega en sus alegaciones que pretenda convertirse en el «complemento y apoyo político a la acción violenta de ETA» y asegura que es «un hecho notorio» que las trayectorias políticas de EA y de Alternatiba rechazan la violencia y el terrorismo.



NNGG exige la detención de Troitiño
Unas cien personas, convocadas por Nuevas Generaciones del PP, se concentraron ayer en Madrid para exigir la detención del etarra Antonio Troitiño y denunciar que la Universidad Complutense «hace apología del terrorismo» al no investigar la autoría de una pancarta exhibida en defensa del terrorista. En la concentración, que tuvo lugar en la Plaza de la República Dominicana donde fueron asesinados 12 guardias civiles, también exigieron que Bildu sea ilegalizado y no esté en los ayuntamientos.

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