La ONU alerta de los avances en el plan atómico

JERUSALÉN- En medio de las acusaciones de Israel y Estados Unidos a Irán por su programa nuclear y de los desmentidos de Teherán acerca de su supuesta intención de alcanzar la bomba atómica, la Organización Internacional de la Energía Atómica (OIEA), dependiente de Naciones Unidas, emitió ayer un nuevo informe que pone en aprietos a la República Islámica. Según un informe de la OIEA, Irán ha triplicado su capacidad de enriquecer uranio a alto nivel. El informe habla de «serios motivos de preocupación» y destaca las profundas diferencias entre la OIEA e Irán. Para el organismo, Irán ha acelerado el ritmo de enriquecimiento de uranio en los últimos cuatro meses.

La razón de este avance es el gran aumento en la cantidad de centrifugadoras capaces de enriquecer uranio al 20% en la instalación subterránea de Fordo. De acuerdo con el documento, que al cierre de esta edición no se había publicado oficialmente, el régimen de los ayatolás ya tiene en su poder más de 100 kilos de uranio altamente enriquecido, algo menos de la mitad de la cantidad necesaria para desarrollar un cabezal nuclear. Cabe recordar que para usos civiles un nivel de enriquecimiento del 3,5%, considerado como bajo, es suficiente. El nivel de 20% ya es considerado alto. De ahí al necesario para usos militares –o sea más del 90%– el paso a dar es pequeño. Tecnológicamente, el gran avance se produce entre 3.5% y 20%. Los inspectores también se quejan de que Irán no les proporcionó las respuestas satisfactorias a sus preguntas relacionadas al objetivo no civil ni pacífico. Teherán se concentró más que nada en alegar que las sospechas sobre la vertiente militar de su programa nuclear carecen de fundamento.

Hace pocos días, el director de la OIEA, Yukiya Amano, expresó su decepción por la actitud hostil de Irán sobre las peticiones de la agencia. Impidió a los técnicos entrar en Parchin, una instalación militar en la que se cree que se prepara una dispositivo nuclear.

Más cerca de la bomba
Tanto los últimos datos ofrecidos por la OIEA como los aportados por los analistas nucleares coinciden en señalar que el régimen de los ayatolás está más cerca de alcanzar un punto de no retorno y obtener el arma nuclear. Un hecho que desestabilizaría el ya convulso Oriente Medio.