Barcelona

La Cámara de Comercio se reinventa

La Cámara de Comercio se reinventa
La Cámara de Comercio se reinventalarazon

BARCELONA- Cuando el anterior Gobierno aprobó en 2010 un decreto que eximía a las empresas de pagar una cuota obligatoria a las cámaras de comercio, estas tuvieron que encauzar forzosamente un proceso de modernización para fidelizar a sus asociados. Al fin y al cabo, al menos en el caso de la Cámara de Barcelona, el 60 por ciento de sus ingresos venían de la cuota obligatoria. Con el fin de evitar fugas y apoyar a los empresarios, la entidad cameral barcelonesa presentó el Club Cambra, una plataforma de negocios para las empresas y autónomos de la provincia que, además, contará con una línea de financiación para sus socios de 2.000 millones de euros pactada con La Caixa.

La Cámara quiere mantener así la relación con las 250.000 empresas que actualmente forman parte de la institución. El Club Cambra, por lo tanto, nace con la intención de ayudar a las empresas a promover su actividad económica y empresarial, a fomentar su internacionalización, su competitividad o la formación de sus directivos.

«Reinventarse»
El presidente de la Cámara, Miquel Valls, destacó que en esta nueva etapa la entidad se propone «reinventarse» para ayudar, básicamente, a «hacer negocio» a las empresas y para ello han creado el Club Cambra.

La línea de crédito es el elemento estrella del nuevo servicio pero, también se creará una comunidad «on line» que permitirá a las empresas relacionarse con otras compañías de su sector, intercambiar documentos y acceder a una red que reúne a 1.500 cámaras de comercio en todo el mundo, entre otras funciones. «Es una plataforma abierta a todas las empresas, desde las grandes a los autónomos y que ayudará a hacer negocios», explicó el director gerente Xavier Carbonell.

El diseño del Club Cámara incluye dos niveles: uno gratuito para los socios de la institución, y otro, Premium que tendrá una cuota de 145 euros mensuales y «segmentará ventajas o servicios a un colectivo más específico», en palabras de Carbonell. Entre otros, «el acceso en zonas preferentes cuando se celebren determinados actos», añadió.

 

Fainé defiende el papel de los empresarios «como motores del país»
BARCELONA- Como primer miembro del Club Cambra, el presidente de La Caixa, Isidro Fainé, fue el encargado de dar el discurso fundacional de la nueva etapa de la Cámara de Comercio de Barcelona. Fainé admitió que «no es fácil combinar la austeridad con el crecimiento», pero, a su juicio, la crisis no se superará si no existe la capacidad «de recuperar el crecimiento económico». Por ello, el presidente de la entidad financiera, que ha pactado con la Cámara una línea de financiación para sus miembros de 2.000 millones, defendió el papel de los empresarios como «verdaderos motores del país», y elogió su capacidad de tomar «riesgos» en un contexto como el actual y ha lamentado las «trabas que no paran de poner los reguladores».