Nueva York

Comienza en Nueva York el juicio contra un exconsejero de Goldman Sachs

El juicio contra el exmiembro del consejo de administración de Goldman Sachs Rajat Gupta comenzó hoy en Nueva York con la selección del jurado popular que tendrá que decidir si éste filtró información privilegiada tanto de ese banco como de otras empresas a su amigo Raj Rajaratnam.

Gupta, en libertad bajo fianza de 10 millones de dólares, está acusado de haber pasado entre marzo de 2007 y enero de 2009 datos confidenciales de Goldman Sachs y otras firmas a Rajaratnam, quien cumple una condena de 11 años de cárcel por el mayor fraude por uso de información privilegiada de la historia de Wall Street.

El que fuera miembro de los consejos de administración de grandes empresas estadounidenses como el banco de inversión Goldman Sachs o el fabricante de productos para el hogar Procter & Gamble acudió hoy a los juzgados donde comienza un juicio que se espera que dure entre tres y cuatro semanas.

Se espera que hoy la defensa y la Fiscalía expongan sus alegaciones iniciales en el juicio, en el que se prevé que testificarán entre otros el consejero delegado de Goldman Sachs, Lloyd Blankfein, quien ya compareció en el juicio de Rajaratnam y dijo que Gupta violó las normas internas de confidencialidad.

Gupta, de 63 años, se declaró no culpable en octubre de 2011 de los seis cargos presentados contra él por la Fiscalía, cinco por uso de información privilegiada y otro más por conspirar para cometer un fraude de ese tipo, delitos que acarrean una pena máxima de 20 años de cárcel en caso de ser encontrado finalmente responsable.

Según la Fiscalía, que amplió el número de cargos contra Gupta en enero, éste y Rajaratnam participaron junto a otros en un fraude al "desvelar"material e información confidencial relacionada con Goldman Sachs, Procter & Gamble y Smucker's para después realizar transacciones en los mercados de valores con base en esa información.

En concreto, la Fiscalía acusó al exconsejero de Goldman Sachs de haber informado a su amigo sobre los beneficios de esas dos primeras firmas y sobre una inversión de 5.000 millones de dólares que el grupo Berkshire Hathaway, del multimillonario inversor Warren Buffett, planeaba realizar en el banco estadounidense.

Rajaratnam empleó a una red nacional de operadores, agentes financieros y ejecutivos de múltiples empresas para que le ofrecieran información confidencial con la que ganó 63 millones de dólares.

La sentencia contra Rajaratnam es hasta ahora la más dura aplicada por la Justicia de EEUU desde que el Gobierno del presidente Barack Obama inició una campaña contra operadores en los mercados financieros que aprovecharon para beneficio propio la información confidencial que obtenían de otras empresas.