Pérez Casanova: «Me gusta buscar un equilibrio entre realidad magia y ficción»

MURCIA- En los últimos años, Pedro Diego Pérez Casanova (Cataluña, 1968) ha ido construyendo un corpus artístico sólido en el que la luz es el componente esencial. Elemento que está omnipresente en «A la luz de dos ciudades», su última muestra que se puede descubrir hasta final de este mes en el Museo del Teatro Romano y en la sala de exposiciones del Ayuntamiento de Cartagena.

-¿Por qué gira la exposición en torno a Roma y Cartagena?
-Cartagena porque es la luz que veo casi todos los días y me inspira, y Roma por lo que participa de Cartagena. Siempre han estado en mi imaginario. En esta exposición me he limitado a vivir, sentir y plasmar cosas de las dos ciudades.

-¿Cuál es su pieza estrella?
-Me gusta especialmente un boceto de un mural de grandes dimensiones que hice en el hospital de Santa Lucía de Cartagena y que se inauguró hace poco. Le tengo un cariño especial porque el proyecto del mural fue algo a lo que me tuve que enfrentar y supuso una odisea pictórica, algo inusual. Para hacer ese boceto tuve que recorrer todas las montañas que rodean el puerto de Cartagena.

-Hoy que vivimos en la era de la alta definición, la visión borrosa está muy presente en su obra, ¿qué significado tiene?
-Intento huir de la pintura fotográfica. La respeto pero procuro hacer una pintura que tenga presencia humana y en la que se note mi huella, que se muestre intervenida por mí. Me gusta buscar un equilibrio entre realidad, magia, ficción y lo imaginado. Añadir algo más además de la fría realidad. Con texturas y difuminados procuro hacer una pintura propia que contenga mi sello personal.

-¿La luz es una de sus máximas fijaciones?
-Sí, soy un obseso de la luz. Aunque no es imprescindible que un cuadro tenga luz para que funcione como tal, incido mucho en eso. Pienso que es la sabia moduladora de formas y la que imprime un punto distinto. La luz la valoro, la intensifico y procuro que siempre esté presente. Además, necesito la luz, me da vida.

-Algunos artistas contemporáneos han dejado de pintar porque consideran que la pintura ha muerto, ¿qué opinión tiene al respecto?
-Es una opinión libre y respetable y, en parte, la comparto. Creo que está muerta en el sentido de que no se están dando los grandes saltos que en otro momento se dieron, pero debemos ser conscientes que han pasado tantos siglos de pintura que todo está hecho. Yo no he inventado nada nuevo, pero creo que una obra no tiene que ser necesariamente novedosa para que sea respetable.

-¿Qué otros proyectos tiene?
-Estoy preparando una exposición que se podrá ver fuera de la Región de Murcia y quizá en el extranjero.

En primera persona
- Dígame una ciudad:Cartagena.
- Un sueño:Volar.
- Una filosofía de vida.La humildad.
- Una preocupación. El futuro.
- Una comida: La paella.
- Un defecto: La indecisión.
- Una virtud: No sabría decirla.
- Un recuerdo triste: La muerte de los seres queridos.
- Un recuerdo alegre: El nacimiento de mis hijos.
- Un pintor: Velázquez.
- Un referente: Una persona anónima en mi imaginario que rezuma bondad y lucha contra las injusticias.