Ankara

Los combates en la frontera Siria obligan a cerrar colegios en Turquía

Los continuos combates entre las fuerzas de la oposición siria y el Ejército gubernamental al borde de la frontera turca han obligado a cerrar varios colegios y han causado tres heridos en la localidad de Akçakale, por lo que las autoridades han pedido a los vecinos que extremen las precauciones.

Según ha relatado por teléfono hoy un periodista local, los combates se han intensificado desde que la oposición ocupó el miércoles la aduana en el paso fronterizo de Tell Abyad, junto a Akçakale.

"Hay tiroteos intensos y bombardeos con morteros. Obviamente, las fuerzas gubernamentales sirias están atacando para recuperar el control de Tell Abyad", explicó.

"Se puede oír muy de cerca en el pueblo. A veces caen algunos trozos de metralla de mortero. Ayer, tres personas sufrieron heridas de bala", añadió el periodista.

Los colegios en Akçakale quedarán cerrados hasta el lunes ante el riesgo por las balas perdidas desde el lado sirio.

Igualmente, las autoridades locales han advertido a los vecinos, por el mismo motivo, que no salgan a los tejados de sus casas.

Varios canales turcos de televisión mostraron ayer como miembros de la oposición arriaron la bandera oficial siria sobre el edificio del paso fronterizo.

De hecho, fuentes del Ministerio de Exteriores turco confirmaron a Efe que los rebeldes controlan ya todos los pasos fronterizos entre Siria y Turquía.

Aunque Turquía no permite a sus ciudadanos cruzar a Siria por razones de seguridad, sí sigue admitiendo la entrada de sirios en cualquier punto de la frontera.

Según datos oficiales difundidos hoy, ya hay 84.000 refugiados sirios registrados en 12 campamentos de seis provincias turcas.

Pero un alto funcionario turco reconoció el miércoles a Efe que además hay "decenas de miles"de sirios viviendo fuera de los campamentos, en gran parte personas con suficientes recursos como para alquilar un apartamento y esperar el fin del conflicto.

Las autoridades turcas han pedido a los refugiados que se registren y se trasladen a otras provincias, ante lo que parece ser el temor a tensiones entre los sirios suníes y la mayoría alawí de la provincia fronteriza de Hatay, la misma rama del islam que profesa la elite dirigente en Siria.

De hecho, esta semana se registró en Hatay una protesta contra la presencia de los refugiados que acabó con una intervención policial y varios heridos leves.