El estilo de «La Roja»

Donetsk- «Toda la vida buscando un estilo y ahora que lo tenemos, no nos gusta», se queja Vicente del Bosque. «Este estilo es el que nos ha llevado al éxito. Siempre estamos disconformes con todo», añade. E insiste en la idea que ha llevado a «La Roja» a ganarlo todo, aunque ya haya empezado a recibir críticas por ser aburrida. Ese presunto aburrimiento viene forzado en la mayoría de las ocasiones por la actitud del rival, que espera atrás, tapando huecos y esperando un error de España para salir al contraataque.

«Cuando sólo un equipo quiere atacar porque el otro le espera encerrado y sólo quiere tapar huecos y que no haya peligro, el partido no suele ser tan atractivo. Pero éste es el estilo que ha cambiado la historia de España para bien», explica Iniesta. «Prefiero que el equipo contrario juegue replegado. Así nos podemos dar la satisfacción de robar la pelota más cerca de su portería y la tendremos más tiempo en su campo», confirma Del Bosque. «Aunque eso no siempre ocurre, Portugal tiene alternativas».

Desde que comenzó el campeonato, el seleccionador ha reforzado en cada aparición pública el estilo de «La Roja» y ha insistido en que el equipo se siente mejor con la pelota encerrada. Así, el fútbol brillante y rápido de la Eurocopa de 2008 se ha ido transformando en un juego más sereno, de posesiones largas a la espera de encontrar un hueco en la defensa del rival. Ese juego empieza a ser imitado por selecciones como Francia o Italia, aunque contra España modificaron sus planteamientos para taponar las virtudes de «La Roja». «En el fútbol hay tendencias, el Mundial lo marcaron selecciones como España, Holanda y Alemania. El fútbol está muy globalizado, todos tienden a lo mismo», dice.

Aunque al seleccionador no le parece mal que los rivales modifiquen su estilo para enfrentarse a España, no cree que ése vaya a ser el caso de Portugal. Los portugueses están acostumbrados a jugar así, a conceder la pelota al contrario para aprovechar las carreras de Cristiano y de Nani. «No creo que Portugal cambie. Es un equipo estable, no puede serlo más. Sólo ha hecho un cambio en la alineación. Es una muestra de estabilidad, de un entrenador que ha dado con la tecla. Espero un equipo como el que hemos visto en estos cuatro partidos», explica. «La idea de Portugal será la misma que en el Mundial. Nos esperarán, intentarán cerrarnos los espacios interiores, que no tengamos fluidez. Ellos juegan con un centro del campo muy fuerte. Si no estamos bien, Portugal manejará el partido y es lo que no queremos», afirma Iniesta. No le asusta el rival, ni el cansancio, sólo piensa en hacer historia el domingo en la final de Kiev.
«Quedan dos partidos, el último esfuerzo para conseguir otro campeonato. Estamos centrados en eso. Tenemos la ilusión, las ganas de jugar otra final y de hacer el grandísimo partido que nos exigirá Portugal. El equipo está preparado para dar ese paso», admite. El paso que le permitiría cerrar el círculo que nadie ha cerrado antes al ganar dos Eurocopas consecutivas y el Mundial en medio. Una hazaña que tendría dedicatoria: «Ojalá podamos dedicar el paso a la final y hasta el torneo a Miki Roqué».

El palco, casi desierto
Alejandro Blanco, presidente del COE, será la única autoridad española presente en el Donbass de Donetsk, como ya sucedió contra Francia. Aunque el partido lo verá en un palco de la UEFA y no en el de honor. El boicot al Gobierno ucraniano hace que ninguna autoridad política lo acompañe, ni siquiera el secretario de Estado para el Deporte, Miguel Cardenal, habitual durante la primera fase. El boicot sólo se rompería en caso de que España alcanzara la final, a la que acudiría Mariano Rajoy.