Bruselas

Cameron rechaza los ataques por su crítica al multiculturalismo

Las palabras del primer ministro británico sobre el «fracaso del multiculturalismo» han desatado reacciones muy diversas en Reino Unido. Si bien la comunidad musulmana y la oposición han coincidido en acusar a David Cameron de «confundir objetivos», al «premier» le han florecido las simpatías entre la extrema derecha, en concreto entre los miembros de la Liga de la Defensa Inglesa (EDL).

Cameron asegura que el multiculturalismo británico ha fracasado
Cameron asegura que el multiculturalismo británico ha fracasadolarazon

Y es que, casualmente, este grupo había convocado una manifestación antiislamista en la ciudad de Luton, al sur de Inglaterra, que congregó ayer a varios miles de personas. La coincidencia fue calificada por la comunidad musulmana de «publicidad gratuita para la EDL» y de «inoportuna» por la oposición. «El Estado tiene que ser muy cautelosos en el uso de su poder para moldear los valores culturales», expresó ayer la ex ministra laborista Margaret Hodge en declaciones recogidas por «The Observer». Además, el director de la Fundación Ramadán, Shaqif Mohammed, lamentó que esas palabras pudieran «acrecentar la histeria y la paranoia colectiva contra el islam».

Lo cierto es que las declaraciones de Cameron favorecieron una atención mayor sobre el desarrollo de la protesta en Luton, donde los manifestantes se mostraron satisfechos por la postura del primer ministro. El líder de la EDL, Stephen Lennon, aseguró que ésta respondía a «una oledad de patriotismo que se extiende por toda Inglaterra».

La concentración de este grupo –que asegura no estar vinculado con ningún partido político británico–se convocó a través de las redes sociales. Ya en anteriores encuentros han sido protagonistas de enfrentamientos con grupos antifascistas y la de ayer no fue una excepción. La Policía tuvo que intervenir y hubo varios heridos leves. También fueron detenidas ocho personas.

Mientras tanto, Downing Street emitió un comunicado en el que David Cameron aseguró no estar «en absoluto arrepentido» por su discurso del pasado sábado en la Conferencia de Seguridad de Múnich. En ella el primer ministro británico admitió –al igual que ya lo hizo la canciller Merkel meses antes– el fracaso del modelo multicultural en Reino Unido, donde, según dijo, la «solidaridad pasiva» de la sociedad ante las «prácticas inaceptables» de algunas comunidades había degenerado en una pérdida de valores y un fortalecimiento del extremismo.