Sevilla

La empresa que «coló» jubilados en Mercasevilla operó en otros 36 ERE

El presidente del Partido Popular, Mariano Rajoy, ha afirmado hoy que espera que haya "responsabilidades políticas"y "juzgados"que tomen decisiones "a la mayor celeridad posible"sobre el caso de las supuestas irregularidades en los ERE de Andalucía.

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La dimensión de la trama de los expedientes de regulación de empleo desborda el análisis de la Junta de Andalucía y la investigación interna que ha abierto. La consejera de Presidencia, Mar Moreno, aseguró el martes que el Ejecutivo había hallado 37 nuevas irregularidades en 30 de los 45 expedientes «vivos» analizados hasta ahora. Ayer mismo, el consejero de Justicia y Gobernación, Luis Pizarro, se aferró al argumento de que el delito es cosa de «cuatro sinvergüenzas». Sin embargo, la realidad es otra. Más grave.

Sólo la mediadora Vitalia Vida, implicada en la trama por incluir «intrusos» en los ERE de Mercasevilla o Río Grande, participó en la tramitación de 36 expedientes laborales desde el año 2001, momento en el que los fondos para prejubilaciones dejan de publicarse en el BOJA y se transfieren opacamente a través de la «administración paralela». En el listado, al que ha tenido acceso LA RAZÓN, se citan algunos de los mayores ERE que se han llevado a cabo en los últimos años, como los de Astilleros de Huelva, Altadis, Delphi, Egmasa (la empresa mercantil dependiente de la Consejería de Medio Ambiente), SOS Cuétara o Tioxide. La otra empresa mediadora que participó en numerosos expedientes es Uniter S. L.

De este modo estaríamos hablando de los expedientes de miles de empleados que han pasado por una empresa en la que convergen varios hilos de la trama. El director nacional de Vitalia Vida S.A, Antonio José Albarracín, el delegado regional, Jesús María Bordallo, y especialmente el comercial Francisco José González, están implicados en las irregularidades de los dos expedientes del caso Mercasevilla. La Policía Judicial detuvo incluso a este último por los presuntos delitos de estafa y cohecho. En alianza con otro de los hombres clave de la trama, el exsindicalista Juan Lanzas –también prejubilado irregularmente junto a su mujer en la empresa malagueña Hitemasa–, se habría repartido mes a mes la prima de 154.000 euros que le correspondía a Carmen Fontela, que aparece en el ERE de Río Grande de 2005 pese a no haber trabajado nunca en el restaurante sevillano.

Lanzas y Francisco José González mediaron los dos en Mercasevilla y también en Río Grande. De hecho, la responsable del restaurante aseguró en su declaración ante la Policía Judicial que «apareció en varias ocasiones, acompañando a Francisco González otra persona llamada Juan Lanzas, que se presentó como mediador». De ahí que el exsindicalista pudiera haber intervenido en los ERE de muchas de de estas 36 empresas. De hecho, González trabajó en la compañía hasta noviembre de 2010.

¿Cuál ha sido el papel de Vitalia? Basicamente esta mercantil servía de enlace para la contratación de pólizas de seguros con grandes compañías como BBVA o Vitalicio. El teórico motivo de recurrir a estos «broker» era conseguir ventajas como el pago aplazado de las primas a las compañías aseguradoras. Pero el informe de la Brigada de la Policía Judicial desmonta este argumento: «Cosa difícil de entender puesto que la Junta de Andalucía podría haber negociado directamente con cualquier entidad aseguradora de primer nivel el pago aplazado de las pólizas. No tiene sentido que lo que no puede conseguir la Junta sí lo conseguiría un mero intermediario privado».