El sector le gana la partida a la crisis

Así lo indica el informe de aDeSe (Asociación Española de Distribuidores y Editores de Software de Entretenimiento). Durante los primeros ocho meses de 2010, los beneficios aumentaron un 5%. Y eso sin contar con las ganancias de la próxima campaña navideña, que supone un 40% de los ingresos anuales.

Sobre todo, se espera con impaciencia el juego bélico «Call of Duty: Black Ops», que podría batir récord en todo el mundo. Los veinte millones de unidades vendidas de la entrega en 2009 avalan estas previsiones María López, directora de negocio de PlayStation, afirma que «será una buena campaña la de esas fiestas, no sólo por las ventas de hardware, sino también por lo que suponen las de software. Tenemos grandes expectativas depositadas en el lanzamiento de "Gran Turismo 5"y en el catálogo de juegos para PlayStation Move». Sobre la salud del área, Carlos Iglesias, secretario general de aDeSe, opina que es «saludable, teniendo en cuenta el estado general de la industria del entretenimiento. Todos los sectores acusan disminuciones en sus cifras de negocio, por lo que las nuestras resultan esperanzadoras». En cuanto a la piratería, es difícil hablar de cifras reales sobre cómo afecta a la venta de videojuegos. Cierto que no todas las descargas ilegales se convierten automáticamente en ventas no realizadas, pero parte de la caída del 16% de las ventas que registró la industria española se debe a la facilidad de acceder a dichas copias. Un estudio realizado por ESA (Entertainment Software Association), que analiza las conductas delictivas on line, señala que España duplica el número de descargas ilegales a las realizadas en EE UU. Y ha sido la coyuntura económica mundial la que ha favorecido el aumento de las mismas. Por consolas, las más afectadas son la Nintendo DS y la PSP. Hasta un punto en el que ya son muchos los desarrolladores que se niegan a lanzar sus juegos en dichos formatos. También el PC y la Wii salen malparadas. Pero no todos los datos son negativos. La industria española sigue siendo la número uno entre las que forman el ocio audiovisual.

Continuó siendo líder con una cuota de mercado del 53% y volúmenes de facturación que duplican la suma de los registrados por la música, el DVD y el cine. Además, nuestro país mantiene su posición como cuarta potencia europea en consumo, sólo superado por Reino Unido, Francia y Alemania.